INVITACION A LEER

La fiesta de los disfraces, de Benjamín Gavarre. México.

  LA FIESTA DE LOS DISFRACES   de Benjamín Gavarre                                              El escenario es una gran habitación...

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19/2/21

EL GORILA. A. JODOROWSKY

 












EL GORILA

JODOROWSKY, DUPEYRON, LANUZA



   GORILA: ¡Honorables Académicos! Amigos, Honorable mesa directiva,  doctores, maestros, estudiantes, público en  general, hola a todos, me hacen un honor al invitarme a presentarme a esta Real Academia de las Ciencias y de las Artes,  para formar parte de este grupo de intelectuales, de sabios, de artistas, de maestros, Hola, se me pidió, ahora que voy a formar parte de este grupo, como es costumbre, se me pidió un informe, también se me pidió hablar sobre sobre mi antigua vida de mono.


          Desgraciadamente en lo se refiere de mi antigua vida de mono, no puedo complacerlos, pues ya se han cumplido cinco años los que me separan de aquella vida de homínido, tiempo corto tal vez si lo miden por el calendario, pero para mí ha sido interminablemente largo, acompañado de hechos o de gente importante, por consejos, aplausos, por música orquestada, pero en realidad solo, pues todo este acompañamiento que se me había puesto; lo único que provocó es que se me olvidará mi pasado los recuerdos de mi juventud. 



Para poder formar parte de esta academia, lo primero que tuve que aprender fue a olvidarme de  subir a los árboles, acicalar a otros simios, ah, y las danzas de apareamiento. Poco a poco me recluí. Me he sentido mejor en el mundo de los hombres, de mi vida de mono me he alejado tanto, de tener fuerzas y voluntad suficiente para regresar, para volver… no podría. Siento que moriría en el intento, sin embargo, podré presentar el informe que me han solicitado. Cosa que por lo demás hago con gran placer. ¿eH?...


   El siguiente Informe de investigación trata del exilio de la naturaleza salvaje hacia la humanización de los animales en cautiverio. El objetivo de este estudio es demostrar que la naturaleza animal ha sido erradicada hasta el último resquicio, ejemplo de esto es que ya no me acuerdo de aquella vida... ¿eH?... banana, danza de apareamiento, acicalar a otros homínidos, permítame, no, no, no, yo ya no soy un animal, recuerdos, nada más ahí, los resultados lo demuestran: se ha erradicado la naturaleza salvaje en un 95% con un 5% de error en estándares internacionales, ah, los recuerdos, antes siempre había sido libre y por primera vez me encontraba atrapado, si me hubiesen atado, o amarrado, o encadenado, o lo que fuera, no habrían disminuido mis deseos de libertad, no tenía salida, pero debía que procurarme una, sin ella no habría sobrevivido, siempre viví detrás de unos barrotes, metido siempre en... hubiera reventado  inevitablemente. 


   Pero como en el mundo de los hombres, a los monos les tocan las jaulas, dejé de ser un mono, me esforcé por caminar erguido, caminar con las cuatro patas al suelo, nunca más, ahora debía caminar como los hombres, subí como los hombres, rompiéndome la espalda como los sapiens, ya no subía más los árboles, ahora caminaba únicamente con las traseras, la patas, claro, ejercité las manos despegando los dedos como los hombres, y caminaba derecho, derecho, derecho, como los sapiens, ¿Qué fue aquello? ¿Qué fue lo que me pasó?, inteligencia, ¿Sería inteligencia? No sé qué fue, quizá una asociación de ideas claras, hermosas, seguramente se me habrán ocurrido en la barriga ¿No es vedad? Si a usted… ¿Dónde se me ocurrió esto?  Inteligencia.  ¿En la barriga? Seguramente. Porque según dicen algunos apócrifos periodistas: “los monos piensan con la barriga”, así lo dijo el reportero que siempre viene, me sigue y publica lo que... me cagan los periodistas. ¿Por qué invitaron a la prensa? ¿No dijimos que nada más eran los académicos y que nada más eran algunos invitados? Ahí está un periodista sacando fotos y ahí hay otro sacando... ¡Por favor! Yo dije que venía siempre y cuando se, se... ¿He? Pues sí pero me dio, estoy... Perdón, perdón, pido disculpas, a usted también, perdóneme, que se me sale lo animal de vez en cuando, ¿eH?... claro, si gracias, cuento con usted: uno, dos, tres, ya, ya estoy bien, cuatro ya, ya, cinco, ya !Los monos con cinco tenemos, diez. (Respira y exhala) ¡Ya!


   Temo que no me he explicado con corrección, lo que quiero decir con salida, salida, salida, empleo la palabra en su sentido más cabal y más común, intencionalmente no dije libertad, no hablo de esa gran sensación de libertad hacia todos los ámbitos, cuando mono, posiblemente, la viví y he visto hombres que la añoran, se pasan la vida tratando de ser libres, y, nada más por la libertad. Lo digo de pasada: uno se engaña demasiado entre los hombres, ya que si la libertad es uno de los sentimientos más sublimes, así también de sublimes son los correspondientes engaños.

 

   Yo he viajado entre los Sapiens, ustedes lo saben de país en país, en el circo, en experimentos científicos, de vacaciones. He visto multitudes de hombres con hambre y con enfermedades y con la obligación de trabajar desde el alba hasta el anochecer. Todo el día trabajando bajo el sol, picando piedra o detrás de un escritorio, los he visto ser perseguidos a la menor protesta… Párense, párense ahí o disparo, los he visto correr, huír, corran ahí vienen los narcos, corran ahí vienen los soldados, corran ahí vienen los del fisco, agarren piedras y corran que ahí vienen los ignorantes, la idiotez se pega, los he visto ser golpeados, acribillados, descabezados, descerebrados, deshumanizados: te dije que te pararas hijo de tu… cállate, ca… cállate hijo de tu pinch… cállate, te callas o te doy.. Los he visto escurrir su sangre humana.

  

             Y todo este montón de harapos forma la base de una pirámide de poder, donde capa por capa los hombres se van aplastando unos sobre otros, abajo los pobres, los ignorantes, arriba de estos, los empleados, arriba de los burócratas, los ricos los aplastan y arriba de los ricos los poderosos, y arriba de estos, otros. Y así se van aplastando los unos sobre otros; así hasta llegar a lo máximo de la pirámide, donde un hombre solo domina la humanidad, sí dígame, usted, usted, por favor dígame, ¿Usted cree que el hombre que está en lo más alto de la pirámide, usted cree que  sea libre? Usted, dígame ¿Cree que el que está arriba, el que manda, usted cree que sea libre? No haga así, esa es costumbre de changos.


    Dígame, usted, dígame por favor,  dígame por favor si usted cree que el hombre que domina, qué gana, qué ahorra, ¿Usted cree que sea libre?  ¿Qué dice? ¡Por favor!... Yo no quería libertad, yo no quería dinero ni poder,  yo nada más quería una salida, salir del cajón en que me habían metido los hombres y aprendí, aprendí de la vida, del dolor, avancé y me encontré con otra jaula, una jungla humana,  pero pronto aprendí a abrir la puerta, el cerrojo y avancé, me encontré con otra jaula y otra más pero ahora eran en grupos, núcleos, esferas, colores, dinero, poder pero siguen siendo jaulas más jaulas sin barrotes y entre más avanza uno, la jaula se vuelve más difícil de cruzar, y yo aprendí a cruzar jaulas, una y otra y otra más y avancé y siguen siendo jaulas las que uno avanza en la vida del hombre.


    Yo era un hombre importante, poderoso, podía gritar, mangonear, escupir a quien se me diera la gana, me trataban como a una persona especial, mis leperadas ahora se volvieron graciosas, pero siempre estoy rodeado de gente, ahora, ahora, ahora, en este momento tengo mi oficina, siempre tengo gente esperándome para atenderlos y yo los recibo a todos: pasen, pasen, nada más termino de revisar esos documentos y nos vamos a desayunar, yo invito, no se vayan nada más termino, tengo que terminar, tengo que terminar de revisar, Rápido ve a cobrar esto, y ya sabes, si no demandas. Espérenme, espérenme, rápido ve a cobrar esto, ya sabes luego te digo por quien votas. Espérenme, quiero que conozcan a mi nueva secretaria,  está buenísima. Le hablo, permítanme, Señorita Patrisha. ¿Puede venir por favor? Le voy a hacer un dictado, ahí viene,  hay me dicen como la ven, Pase señorita Patrisha, pase por favor siéntese, No allá no, siéntese aquí, truéneme los cacahuates. No se enoje seño… no se enoje, se enojó. Le hablamos a otra, hay muchas.


   Así vivo señores académicos y artistas, en el Neoliberalismo consumista más atroz escupiendo, fumando, bebiendo, humillando, contratando, despidiendo a quien se me da la gana, ahora como hombre importante yo puedo, yo puedo…


  Últimamente he estado pensando habrá valido verdaderamente la pena el haberme escurrido entre los hombres para llegar a este punto de poder, habrá valido verdaderamente la pena el haber dejado mi selva, habrá valido verdaderamente la pena,  no lo sé, no lo sé, no lo sé, no lo sé.  Cuantos años hace ya que no viajo de un árbol a otro, cuantos años hace ya que lucho vengándome de estos dos…. A cuanto ser humano se me pone por delante, ¿Qué he logrado? ¿Escapar? Pero si estoy metido más que nunca en un laberinto sin salida, porque antes no se me presentaran lo problemas, el caso es que hoy los tengo momento a momento metidos en mi cerebro, problemas, y más problemas, problemas, problemas, problemas… y todos ellos sin solución, he decidido como decide la mayoría de los hombres después de luchar, después de luchar la mitad de su vida he decidido igual, igual que lo hacen ustedes los hombres,  me retiro, me jubilo, me voy a mi casa de interés social, un huevito,  eso es todo, eso es todo, eso es todo…


   Una historia que es vivida por cualquier ser humano es igual a la mía, pero no me estoy lamentando, tampoco me doy por satisfecho, con las manos en las bolsas del pantalón, con la botella de coñac sobre la mesa, ahora bebo, fumo, como, y me voy, me voy a mi residencia a horas avanzadas de la noche apestando a alcohol, apestando a tabaco, apestando a hombre.

 

  Tengo una mona semiamaestrada, la rescaté de un circo  enferma, llego en las noches y me preparo para entrar a la jaula de la mona aquella, me preparo, me tengo que desvestir  y entro, se asusta y grita y me tengo que salir, no me deja que me acerque, siente mi olor de hombre, y tengo que salir otra vez, de día no puedo verla, pues tiene en la mirada esa locura del animal perturbado por el amaestramiento, eso únicamente yo lo advierto,  no puedo soportarlo, no puedo soportarlo, veo sus ojos y…  no puedo soportarlo, no puedo…


   En conclusión, señores de la academia de ciencias y las artes, he llegado a donde muy pocos hombres llegan pero yo siendo ya un hombre pregunto ¿Por qué me sacaron de mi selva? ¿Quién les ha dicho que pertenecer a su grupo significa haber triunfado? ¿Quién les ha dicho que el dinero hace a los hombres libres, quien les ha dicho que por un premio, por un papel, por un título ya tengo derecho a gritar, y a mangonear? ¿Quién les ha dicho señoras y señores, que un premio, un premio… es el éxito? ¿Puedo ver la pieza que me van a develar? ¿Puedo verla?, ¿Por qué no? quiero ver la pieza que me van a dar, Quiero ver si me parezco, quiero ver si, si…  véanme ya soy un hombre de verdad, ya soy un hombre,  todos los hombres nacen siendo libres y terminan siendo copias de esclavos, copia de otros, copia de otros, copias, copias.


   En vez de sentirme orgulloso más bien deberían despreciarlos, porque sólo una cosa si he sacado en limpio señores, la vida así, no tiene sentido, no tiene sentido, comer nada más era comer, beber agua nada más era beber agua, nada más beber agua, y dormir sólo era juntar unas hojas y dormir,  yo no era nadie, no me creía nada, sin título ni premio, no era nada, más que un pedazo más de cielo, un trozo más de tierra, en tanto que hoy me he convertido en una isla, dándome de golpes contra las otras islas, angustiado todo el tiempo, vivo angustiado en esta atroz soledad, sólo dos palabras me taladran segundo a segundo la cabeza, el corazón y eso que llaman alma.


    Quisiera volver, quisiera volver, quisiera volver, regresar a mi selva, olvidar sus rostros tan simiescos como el mío, olvidar sus días rellenados con palabras huecas, olvidar sus cuerpos adiposos por el ocio y olvidar, olvidar, olvidar a ese monstruo salvaje que llaman civilización, ¿Qué tienen de civilizados? Al escurrirme entre ustedes, no salí de la jaula, sino por el contrario, me encerré más y más yo solo, aunque desgraciadamente me haya perdido para siempre entre los hombres.


    Banana, ¡Quisiera volver! Acicalar otros ¡Quisiera! danzas de apareamiento ¡volver! 


TELÓN