Mostrando las entradas con la etiqueta Aristófanes Las nubes. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Aristófanes Las nubes. Mostrar todas las entradas

29/10/14

Aristófanes. Las nubes.












Aristófanes
Las nubes



PERSONAJES

ESTREPSÍADES.
FIDÍPIDES.
UN ESCLAVO DE ESTREPSÍADES.
DISCÍPULO DE SÓCRATES.
SÓCRATES.
EL RAZONAMIENTO JUSTO.
EL RAZONAMIENTO INJUSTO.
PASIAS, acreedor.
UN TESTIGO DE PASIAS.
AMINIAS, acreedor.
QUEREFON.
CORO DE NUBES.


[Estrepsíades aparece en su lecho. Cerca de él duermen su hijo y los esclavos]



ESTREPSÍADES
¡Oh Zeus supremo! ¿Es acaso interminable la duración de las noches? ¿Nunca se hará de día? Mucho tiempo ha que he oído el canto del gallo, y sin embargo, los esclavos1 aún están roncando: antes no sucedía así. Maldita sea la guerra, que me impide hasta castigar a mis esclavos. Este buen mozo no despierta en toda la noche, y duerme profundamente2, envuelto en las cinco mantas de su lecho. Pero probemos a imitarle...

¡Pobre de mí! no puedo conciliar el sueño. ¿Cómo he de dormir, si me atormentan los gastos, la caballeriza y las deudas que he
contraído por causa de este hijo? Él cuida su cabellera, cabalga, guía un carro y sueña con caballos; y yo me siento morir cuando llega el
día veinte del mes. porque se acerca el momento de pagar los intereses...3 

Muchacho, enciende la lámpara y tráeme el libro de cuentas, para que examine los gastos, y averiguando a quiénes debo, calcule los intereses... Ea, veamos, ¿cuánto debo? "Doce minas a Pasias". ¿Y por que doce minas a Pasias? ¿En qué las he gastado?

Cuando compré el Coppatia4 ¡Desdichado de mí! ; Ojalá me hubiesen vaciado antes un ojo de una pedrada! 5

FIDÍPIDES (soñando)
Filón, guías mal: tu carro debe seguir a éste.

____________________________________________
1 Sin duda por el temor de que evitasen los malos tratamientos pasando al campo enemigo. La guerra a que alude Aristófanes es la del Peloponeso.
2 Verum pedit.
3Los intereses de las cantidades tomadas a préstamo se pagaban a fin de mes.
4 Nombre de un caballo, derivado del coppa (90) signo de la numeración griega, que marcado en la piel designaría su precio.
5Porque entonces no lo hubiera comprado.
_________________

ESTREPSÍADES
He aquí el mal que me mata: hasta durmiendo sueña con caballos.

FIDÍPIDES (soñando)
¿Cuántas carreras es necesario dar en el certamen?

ESTREPSÍADES
A tu padre sí que le haces dar carreras... ¿Pero que deuda contraje6 después de la de Pasias? Veamos: "tres minas a Aminias7 por el carro y las ruedas".

FIDÍPIDES (soñando)
Lleva el caballo a la cuadra y revuélcalo antes en la arena.

ESTREPSÍADES
¡Infeliz! tú sí que me das vuelco a mi fortuna; unos me tienen ya citado a los tribunales, otros me piden que les garantice el pago de los intereses.

FIDÍPIDES (despertando)
Pero, padre, ¿qué te angustia que no haces más que dar vueltas toda la noche?

ESTREPSÍADES
Me muerde cierto Demarco8 de las camas.

FIDÍPIDES
Por favor, querido, déjame dormir un poco.


__________________________________________
6Parodia de Eurípides, según el escoliasta.
7 Se cree que bajo este nombre Aristófanes alude a Aminias, hijo de Prónapo, autor de un decreto que prohibía a los poetas cómicos burlarse de los magistrados.
8 Demarco se llamaba al jefe de un demo o cantón del Ática; uno de sus deberes era llevar un registro de las deudas de sus administrados y apoderarse de los deudores morosos. Estrepsíades alude a ellos al quejarse de las pulgas de su lecho.
_______________________________________


ESTREPSÍADES
Duerme en hora buena, pero sabe que todas estas deudas caerán sobre tu cabeza... ¡Oh! así perezca miserablemente aquella casamentera que me impulsó a contraer matrimonio con tu madre.
Porque yo tenía una vida dulcísima, sencilla, grosera, descuidada y abundante en panales, ovejas y aceite. Después, aunque era hombre
del campo, me casé con la nieta de Megacles. hijo de Megacles, ciudadana soberbia. amiga de los placeres, con las mismas costumbres que Cesira9 . Después del matrimonio, cuando nos acostábamos, yo no olía más que a mosto, higos y lana de mis ovejas: ella por el contrario apestaba a pomadas y esencias, y sólo deseaba besos amorosos, lujo, comilonas y los placeres de Afrodita10 No diré que fuese holgazana, sino que tejía: y muchas veces, enseñándole esta capa, le decía con tal pretexto: "Esposa mía,
aprietas11 demasiado los hilos".

UN ESCLAVO
No tiene aceite la lámpara.

ESTREPSÍADES
¡Ay de mí! ¿por qué has encendido una lámpara tan bebedora?
Acércate para que te haga llorar.

EL ESCLAVO
Y ¿por qué he de llorar?

ESTREPSÍADES
Por haber puesto una mecha muy gorda... Después, cuando nos nació este hijo, disputamos mi buena mujer y yo acerca del nombre 

____________________________________________
9 Mujer de Alcmeón, que se hizo famosa por su extraordinario lujo.
10 Nos valemos de este rodeo para traducir las palabras KwALábo. 1 ycvcrvAAíbo.. Ambos son sobrenombres de Afrodita, tomados, el primero del promontorio Colias, sobre el cual tenía su templo; y el segundo del acto de la generación. Bajo el primero se oculta un equívoco obsceno que autoriza más nuestra versión.
11 El verbo a:a8áw significa también prodigar y dilapidar.
________________________________________________




que habríamos de ponerle. Ella le posponía a todos los nombres el de caballo, queriendo que se llamase Jantipo, Caripo o Calípedes12.

Yo le llamaba Fidónides13, como su abuelo. Tras largo debate, adoptamos, por fin, un término medio y le llamamos Fidípides14. Su
madre, tomándole en brazos, solía decirle entre caricias: "¡Cuándo te veré, hecho un hombre, venir a la ciudad, ricamente vestido y
dirigiendo tu carro, como tu abuelo Megacles!...". y yo le decía:

"¡Cuándo te veré, vestido de pieles, traer las cabras del Feleo15 como tu padre...!" Pero nunca hizo caso de mis palabras. Y su
afición a los caballos16 me ha perdido. Después de haber meditado toda la noche, he encontrado un maravilloso expediente, que me
salvará si consigo persuadir a mi hijo. Mas, antes de todo, quiero despertarle. ¿Cómo haré para despertarlo dulcemente? ¿Cómo?
¡Fidípides, querido Fidípides!17

FIDÍPIDES
¿Qué, padre mío?

ESTREPSÍADES
Bésame y dame tu mano derecha.

FIDÍPIDES
Hela aquí. ¿Qué ocurre?



__________________________________
12 Nombres en cuya composición entran el sustantivo L ::o (caballo) y los adjetivos .av8Ó ; (rubio), .apLcía (gracioso) y KaAAÓ (hermoso).
13 Significa económico.
14 Nombre compuesto de tcLbÓ (económico) e L ::í (diminutivo de caballo).
15 Monte del Ática. V. Acarnienses, 273.
16 I ::cpo , enfermedad del caballo (morbus equinus), palabra formada por Aristófanes a semejanza de v Krcpo
bcpoa, Lx.
17 CcLbL::Lbítov, diminutivo de Fidípides, imposible de formarse bien en nuestra lengua, por lo cual nos valemos de un cariñoso equivalente.
_____________________________________________



ESTREPSÍADES
Di: ¿me amas?

FIDÍPIDES
Sí, por Posidón ecuestre.

ESTREPSÍADES
Por favor, no me recuerdes nunca a ese domador de caballos; es la causa de todos mis males. Si me amas de todo corazón, hijo mío,
compláceme.

FIDÍPIDES
¿Y en qué quieres que te complazca?

ESTREPSÍADES
Cambia pronto de costumbres, y ve a aprender donde yo te mande.

FIDÍPIDES
Explícate ya: ¿qué quieres?

ESTREPSÍADES
¿Y me obedecerás?

FIDÍPIDES
Te obedeceré, por Baco.

ESTREPSÍADES
Mira a este lado. ¿Ves esa puertecita y esa casita?

FIDÍPIDES
Las veo. ¿Pero qué quiere decir esto?

ESTREPSÍADES
Ésa es la escuela18 de las almas sabias. Ahí habitan hombres que hacen, creer con sus discursos que el cielo es un horno que nos
rodea, y que nosotros somos los carbones19 Ellos enseñan, si se les paga, de qué manera pueden ganarse las buenas y malas causas.

FIDÍPIDES
¿Y quiénes son esos hombres?

ESTREPSÍADES
No sé bien cómo se llaman. Son personas buenas dedicadas a la meditación.

FIDÍPIDES
¡Ah, los conozco, miserables! ¿Hablas de aquellos charlatanes pálidos y descalzos, entre los cuales se encuentran el perdido
Sócrates y Querefón?20


ESTREPSÍADES
¡Eh! calla: no digas necedades. Antes bien, Si te conmueven las aflicciones de tu padre, sé Uno de ellos y abandona la equitación.

FIDÍPIDES
No lo haré, por Baco, aunque me dieses todos los faisanes que cría 
Leógoras.21
______________________________________
18 La palabra griega  tiene una gracia intraducible: literalmente significa un pensadero.
19 Doctrina de Hippón de Samos. El escoliasta de Aristófanes dice que en esta opinión fue también ridiculizada por el poeta Crates. En Las aves (v. 101) se pone en boca del geómetra Metón.
20 Querefón era uno de los discípulos más asiduos de Sócrates, según Platón (Apología).Diógenes Laercio (lib. II. Sócrates, 16) dice que a él dio la Pitonisa aquel conocido oráculo: Sócrates es el sabio entre los hombres. Aristófanes le llama  murciélago (Aves, v. 1296 y 1564).
21 Célebre glotón, padre del orador Andócides.
__________________________________________




ESTREPSÍADES
¡Oh! por favor, queridísimo hijo, ve a la escuela.

FIDÍPIDES
Y ¿qué aprenderé?

ESTREPSÍADES
Dicen que enseñan dos clases de discursos: uno justo, cualquiera que sea, y otro injusto22; con el segundo de éstos afirman que
pueden ganar hasta las causas más inicuas. Por tanto, si aprendes el discurso injusto, no pagaré ni un óbolo de las deudas que tengo por tu causa.

FIDÍPIDES
No puedo complacerte. Me sería imposible mirar a un jinete si tuviese el color de la cara tan perdido.

ESTREPSÍADES
Por Demeter, no comeréis ya a mis expensas ni tú, ni tu caballo de tiro, ni tu caballo de silla23; sino que te echaré de casa enhoramala24 .

FIDÍPIDES
Mi tío Megacles no me dejará sin caballos. Me voy, y no hago caso
de tus amenazas.

ESTREPSÍADES
Pues, aunque he caído, no he de permanecer en tierra25, sino que invocando a los dioses iré a esa escuela y recibiré yo mismo las
lecciones. Pero ¿cómo, siendo viejo, olvidadizo y torpe, podré aprender discursos llenos de exquisitas sutilezas? Marchemos. ¿Por qué me detengo y no llamo a la puerta? ¡Esclavo! ¡Esclavo! 




___________________________________
22 Literalmente mejor y peor.
23  designa un caballo marcado con la letra sigma. circunstancia que parece designar un caballo de lujo.
24 Literalmente a los cuervos c L.  .
25 Quiere decir que no se da por vencido.

______________________________________


UN DISCÍPULO
¡Vaya al infierno! ¿Quién golpea la puerta?

ESTREPSÍADES
Estrepsíades, hijo de Fidón, del Cantón de Cicinno26 .

EL DISCÍPULO
¡Por Zeus! campesino habías de ser para golpear tan brutalmente la
puerta y hacerme abortar27 un pensamiento que había concebido.

ESTREPSÍADES
Perdóname, porque habito lejos de aquí, en el campo; pero dime:¿cuál es el pensamiento que te he hecho abortar?

EL DISCÍPULO
No me es permitido decirlo más que a los discípulos.

ESTREPSÍADES
Dímelo sin temor, porque vengo a la escuela como discípulo.

EL DISCÍPULO
Lo diré: pero ten en cuenta que esto debe de ser un misterio.
Preguntaba ha poco Querefón a Sócrates cuántas veces saltaba lo largo de sus patas una pulga que había picado a Querefón en una ceja y se había lanzado luego a la cabeza de Sócrates28 .

ESTREPSÍADES
Y ¿cómo ha podido?...




________________________________
26 Uno de los cantones del Ática.
27 Alusión al oficio de partera que tenía la madre de Sócrates. Éste solía llamarse comadrón de las almas.
28 Burla sobre las espesas cejas de Querefón y la calva de Sócrates.
__________________________

EL DISCÍPULO
Muy ingeniosamente. Derritió un poco de cera, y cogiendo la pulga sumergió en ella sus patitas. Cuando se enfrió la cera, quedó la
pulga con una especie de sandalias persas29. Se las descalzó Sócrates y midió con ellas la distancia recorrida por el salto.

ESTREPSÍADES
¡Supremo Zeus, que inteligencia tan sutil!

EL DISCÍPULO
¿Pues qué dirás si te cuento otra invención de Sócrates?

ESTREPSÍADES
¿Cuál? Dímela, te lo ruego.

EL DISCÍPULO
El mismo Querefón Esfeteniense le preguntó si creía que los mosquitos zumbaban con la trompa o con el trasero.

ESTREPSÍADES
¿Y qué dijo de los mosquitos?

EL DISCÍPULO
Dijo que el intestino del mosquito es muy angosto, y que a causa de su estrechez el aire pasa con gran violencia hasta el trasero, y como el orificio de éste comunica con el intestino, el trasero produce el
zumbido por la violencia del aire.

ESTREPSÍADES
Por lo tanto, el trasero de los mosquitos es una trompeta. ¡Oh tres veces bienaventurado el autor de tal descubrimiento! Fácilmente
obtendrá la absolución de un reo quien conoce tan bien el intestino del mosquito.



________________________________________________
29 Calzado de mujer. Vid. Lisístrata, 229; Las fiestas de Deméter 734; Las mujeres en la asamblea, 319.
_______________



EL DISCÍPULO
Poco ha una salamandra le hizo perder un gran pensamiento.

ESTREPSÍADES
Dime de qué manera.

EL DISCÍPULO
Observando de noche el curso y las revoluciones de la luna, miraba
al cielo con la boca abierta, y entonces una salamandra le arrojó su
excremento desde el techo.

ESTREPSÍADES
¡Linda salamandra que hace sus necesidades en la boca de Sócrates!

EL DISCÍPULO
Ayer por la tarde no teníamos cena.

ESTREPSÍADES
¡Hem! ¿Y qué inventó para encontrar comida?

EL DISCÍPULO
Extendió polvo sobre la mesa, dobló una barrita de hierro30, y,
recogiendo después el compás, escamoteó un vestido de la palestra.

ESTREPSÍADES
¿Por qué admiramos aún a Tales? Abre, abre prontamente la escuela, y preséntame a Sócrates cuanto antes. Me impaciento por
ser su discípulo. ¡Vivo! abre la puerta. ¡Oh Heracles! ¿De qué país son estos animales?31

EL DISCÍPULO
¿De qué te admiras? ¿Con quiénes les encuentras semejanza?
30 Como para hacer una demostración de geometría.
31 Esta transición indica que la puerta se abre y se ve el interior de la escuela.

ESTREPSÍADES
Con los Lacedemonios hechos prisioneros en Pilo32 ¿Pero por qué miran ésos a la tierra?

EL DISCÍPULO
Investigan las cosas subterráneas.

ESTREPSÍADES
Entonces buscan cebollas. No os cuidéis más de eso: yo sé dónde las hay hermosas y grandes. ¿Y qué hacen esos otros con el cuerpo inclinado?

EL DISCÍPULO
Investigan los abismos del Tártaro.

ESTREPSÍADES
¿Para qué mira al cielo su trasero?

EL DISCÍPULO
Es que aprende astronomía por su parte. Pero entrad, no sea que el maestro nos sorprenda.

ESTREPSÍADES
No, todavía no: que estén aquí; tengo que comunicarles un asuntillo mío.

EL DISCÍPULO
Es que no pueden permanecer largo tiempo al aire y en el exterior.

ESTREPSÍADES
¡En nombre de los dioses! ¿qué son estas cosas? Decídmelo.


_____


32 Alude al mal aspecto que éstos debieron presentar a causa del hambre sufrida durante el sitio de aquella ciudad. Vid. Caballeros, passim. Tucídides, IV, 15, 29-38.



EL DISCÍPULO
Ésa es la astronomía.

ESTREPSÍADES
¿Y ésta?

EL DISCÍPULO
La geometría.

ESTREPSÍADES
¿Para qué sirve la geometría?

EL DISCÍPULO
Para medir la tierra.

ESTREPSÍADES
¿La que se distribuye a la suerte?

EL DISCÍPULO
No. Toda la tierra.

ESTREPSÍADES
¡Gracioso dicho! He aquí una idea muy popular y útil33 .

EL DISCÍPULO
He aquí todo el circuito de la tierra. ¿Ves? Aquí está Atenas.

ESTREPSÍADES
¿Qué dices? No te creo. No veo a los jueces en sesión34 .

_________________________
33 PLUTARCO (Vida de Pericles, 34) asegura que Pericles calmó la irritación del pueblo contra la guerra prometiendo distribuir los campos conquistados. Después de la toma de Mitilene, realizó esta promesa, dividiéndola en tres mil lotes (TUC. III, 50).
34 Alusión a la manía de juzgar de los Atenienses, criticada en Las avispas.
_______________________

EL DISCÍPULO
Sin embargo, éste es verdaderamente el territorio del Ática.

ESTREPSÍADES
¿Y dónde están los Cicinenses mis compatriotas?

EL DISCÍPULO
Helos aquí; y mira también la Eubea, que, como ves, es muy larga.

ESTREPSÍADES
Lo sé: Pericles y vosotros la habéis sometido a mil torturas 35 Pero ¿dónde está Lacedemonia?

EL DISCÍPULO
¿Que dónde está? Hela aquí.

ESTREPSÍADES
¡Cuán cerca de nosotros! Meditad sobre esto y alejadla todo lo que se pueda.

EL DISCÍPULO
Por Zeus, eso es imposible.

ESTREPSÍADES
Pues ya os pesará. ¡Calla! ¿y quién es ese hombre suspendido en el
aire en un cesto?

EL DISCÍPULO
Él.

ESTREPSÍADES
¿Quién es él?

______________________________
35 El verbo griego : significa extender y torturar.
______________________


EL DISCÍPULO
Sócrates.

ESTREPSÍADES
¡Sócrates! Anda y llámale fuerte.

EL DISCÍPULO
Llámale tú; que yo no tengo tiempo.

ESTREPSÍADES
¡Sócrates! ¡Sócrates!

SÓCRATES
Mortal36. ¿Por qué me llamas?

ESTREPSÍADES
Ante todo, te ruego que me digas qué es lo que haces ahí.

SÓCRATES
Camino por los aires y contemplo el Sol.

ESTREPSÍADES
Por tanto, ¿miras37 a los dioses desde tu cesto y no desde la tierra?
Si no es que...

SÓCRATES
Nunca podría investigar con acierto las cosas celestes si no suspendiese mi alma y mezclase mis pensamientos con el aire que
se les parece38 . Si permaneciera en el suelo para contemplar las
regiones superiores no podría descubrir nada porque la tierra atrae a


________________________
36 La palabra griega es mucho más enfática, y literalmente traducida significa efímero, criatura de un día.
37 Y: significa mirar de alto a bajo (despicere) y también menospreciar.
38 Alusión a las ideas de Anaxímenes Milesio, que decía eran principio de todas las cosas el aire y el infinito y que el alma se parecía a aquel primer elemento.
____________________________


sí los jugos del pensamiento lo mismo exactamente que sucede con
los berros.

ESTREPSÍADES
¿Qué hablas? ¿El pensamiento atrae la humedad de los berros? Pero,
querido Sócrates, baja, para que me enseñes las cosas que he venido
a aprender.

SÓCRATES
¿Qué es lo que te ha hecho venir?

ESTREPSÍADES
El deseo de aprender a hablar. Los usureros los acreedores más intratables me persiguen sin descanso y destruyen los bienes que les
he dado en prenda.

SÓCRATES
¿Cómo te has llenado de deudas sin darte cuenta?

ESTREPSÍADES
Me ha arruinado la enfermedad de los caballos, cuya voracidad es
espantosa. Pero enséñame uno de tus dos discursos, aquel que sirve
para no pagar. Sea cual fuere el salario que me pidas, juro por los
dioses que te lo he de satisfacer.

SÓCRATES
¿Por qué dioses juras? En primer lugar, es preciso que sepas que los
dioses no son ya moneda corriente entre nosotros.

ESTREPSÍADES
¿Pues por quién juráis? Acaso por las monedas de hierro, como en
Bizancio.

SÓCRATES
¿Quieres conocer perfectamente las cosas divinas y saber sin engaño
lo que son?

ESTREPSÍADES
Sí, por Zeus, a ser posible.

SÓCRATES
¿Y hablar con las Nubes, nuestras divinidades?

ESTREPSÍADES
Mucho más.

SÓCRATES
Siéntate, pues, en el lecho sagrado.

ESTRIEPSIADES
Ya estoy sentado.

SÓCRATES
Coge esta corona.

ESTREPSÍADES
¿Para qué la corona? ¡Ay de mí!, Sócrates, no me sacrificarás como
a Átamas39 .

SÓCRATES
No: hacemos t
odas estas ceremonias con los iniciados.

ESTREPSÍADES
¿Y qué ganaré con esto?

______________________________
39 Alusión a una tragedia de Sófocles en que Átamas era llevado al sacrificio coronado de flores. Átamas abandonó a su mujer Nefele (la Nube), que se refugió en el Cielo, haciendo sufrir una prolongada sequía al país de su marido. Éste, para evitar tamaño azote, se ofreció a sí mismo en sacrificio; pero en el momento de ir a ser inmolado fue salvado por Heracles. El recuerdo de Átamas, con preferencia a otra víctima, es muy natural en esta comedia por la circunstancia de ser marido de la Nube.
_____________________________

SÓCRATES
Llegarás a ser un molino de palabras, un verdadero cascabel, fino
como la flor de la harina: pero no te muevas.

ESTREPSÍADES
No me engañas, por Zeus; si continúas empolvándome de ese modo
me convertiré pronto en flor de harina40 .

SÓCRATES
Es necesario guardar silencio, anciano, y escuchar atentamente mis súplicas. Soberano señor, Aire inmenso que rodeas la sublime tierra, Éter luminoso, y vosotras Nubes diosas venerables, que engendráis
los rayos y los truenos, levantaos, soberanas mías, y mostraos al filósofo en las alturas.

ESTREPSÍADES
No, todavía no, hasta que me cubra la cabeza con el manto doblado,
no sea que me moje. ¡Pobre de mí! haber salido de casa sin mi
montera de piel de perro.

SÓCRATES
Venid pues, oh Nubes venerables, y mostraos ante él, ora ocupéis la
sagrada cumbre del nevado Olimpo, ora forméis con las Ninfas la
danza sagrada en los jardines del padre Océano, ora recojáis en
urnas de oro las aguas del Nilo, ora residáis en la laguna Meotis, o
sobre las nevadas rocas del Mimas; oídme, aceptad mi sacrificio y
mirad complacidas estas sagradas ceremonias.

CORO DE NUBES
Del seno mugiente del Océano, nuestro padre, levantémonos, Nubes
eternas, ligeras por nuestra naturaleza vaporosa, a las altas cumbres
de los montes coronados de árboles seculares. Desde ellas veremos


_______________________________________
40 Sócrates (según el escoliasta) esparcía harina sobre la cabeza de Estrepsíades, como se acostumbraba a hacer con las tortas de los sacrificios.
a lo lejos el horizonte montuoso, la tierra sagrada, madre de los
frutos, el curso de los ríos divinos, y el mar que murmura
profundamente. Puesto que el ojo infatigable del Éter brilla siempre
con resplandeciente luz, disipemos la niebla oscura que nos rodea, y
mostrémonos a la tierra con todo el esplendor de nuestra belleza
inmortal.
___________________

SÓCRATES
Indudablemente, habéis escuchado mis votos ¡oh Nubes venerables!
¿Has oído tú su voz acompañada de los mugidos del trueno?
ESTREPSÍADES
Yo también os adoro, santas Nubes, y quiero responder a vuestros
truenos41; a ello me obligan el miedo y el temblor; así que, sea o no
lícito, quiero desahogarme42 .
SÓCRATES
No te burles, ni hagas lo que esos cómicos miserables43 ¡Silencio!
Una multitud de diosas se adelantan cantando.
CORO
Vírgenes imbríferas44 vamos a visitar el pingüe territorio de Palas y
la amable tierra de Cécrope, patria de tan grandes hombres, donde se
celebra el culto de los sagrados misterios, se ven el sant uario místico
de las santas iniciaciones45, las ofrendas a los habitantes del Olimpo,
los elevados templos y las estatuas de los dioses, las procesiones
religiosas, los sacrificios a las coronadas divinidades y los festines
de todas las estaciones; y, cuando con la primavera vuelve la fiesta

__________
41 Vestrisque volo tonitrubus oppeaere.
42 Volo cacare.
43 Literalmente tiznados con heces de vino.
44 o ¡fpotopoL en el original.
45 El templo de Demeter Eleusis.
de Baco, los certámenes de los resonantes coros, y el grave sonido
de las flautas.
______________________

ESTREPSÍADES
¡Por Zeus! Sócrates, dime: ¿quiénes son aquellas mujeres que han
cantado con tanta majestad? ¿Son algunas heroínas?
SÓCRATES
No; éstas son las celestes Nubes, grandes diosas de los hombres
ociosos; que nos dan el pensamiento, la palabra y la inteligencia, el
charlatanismo, la locuacidad, la astucia y la comprensión.
ESTREPSÍADES
He aquí por qué al oírlas parece que mi alma va a volar, y ya desea
discutir sobre sutilezas, hablar del humo; contradecir y oponer
argumentos contra argumentos. Así es que desearía, si fuese posible,
verlas personalmente.
SÓCRATES
Mira hacia aquel lado, hacia el monte Parneto. Yo las veo descender
con lentitud.
ESTREPSÍADES
¿Dónde? Enséñame.
SÓCRATES
Míralas; vienen oblicuamente en gran número, a través de los valles
y los bosques.
ESTREPSÍADES
Pero ¿qué es esto? ¡Si no las distingo!
SÓCRATES
Ahí, junto a la entrada.
ESTREPSÍADES
Al fin las entreveo.
SÓCRATES
Ahora las verás perfectamente si no tienes telarañas en los ojos 46 .
ESTREPSÍADES
Sí, por Zeus: ¡oh diosas venerables! ya ocupan toda la escena.
SÓCRATES
¡Y tú que ignorabas su existencia y no las tenías por diosas!
ESTREPSÍADES
No por cierto: pero las creía niebla, humo o rocío.
SÓCRATES
¡Por Zeus! ¿no sabes que éstas alimentan a multitud de sofistas, a
los adivinos de Turios, a los médicos, a los holgazanes que no se
ocupan más que de sus uñas, sortijas y cabellos, a los autores de
ditirambos y a los charlatanes de vaciedades sublimes? A todos
éstos los alimentan, porque las celebran en sus cantos.
ESTREPSÍADES
¿Por eso cantan en sus versos el ímpetu veloz de las húmedas Nubes
que lanzan deslumbradores relámpagos, los cabellos erizados de
Tifón, el de las cien cabezas. y las tempestades furiosas como aves
de rapiña, que vuelan por el éter, nadando por el aire y los torrentes
de lluvia que derraman las Nubes?47 Y en premio de estos versos se
comen los más grandes peces y la carne delicada de los tordos.
SÓCRATES
¿Por causa de ellas, no es justo?


____________________
46 Nisi gramias in oculis habes instar cucurbitae,
47 Parodia del estilo hinchado e incoherente que solían emplear los malos poetas ditirámbicos.
ESTREPSÍADES
Pero dime: si en realidad son Nubes; en que consiste que parecen
mujeres y sin embargo no lo son?
____________


SÓCRATES
¿Pues qué son entonces?
ESTREPSÍADES
No lo sé bien: ahora me parecen copos de lana, pero de ninguna
manera mujeres. Éstas, sin embargo, tienen narices.
SÓCRATES
Vamos, responde a mis preguntas.
ESTREPSÍADES
Pregunta lo que quieras.
SÓCRATES
¿No has visto alguna vez, mirando al cielo, una Nube parecida a un
centauro, a un leopardo, a un lobo o a un toro?
ESTREPSÍADES
Sí, en verdad; ¿y a qué viene esto?
SÓCRATES
A probarte que se transforman como quieren. Así, cuando ven a un
hombre de larga cabellera y pecho velludo como el hijo de
Jenofante, se burlan de su locura, cambiándose en centauros.
ESTREPSÍADES
¿Y qué hacen cuando ven a Simón, ladrón del tesoro público?
SÓCRATES
Para poner de manifiesto sus costumbres, se transforman en lobos.
ESTREPSÍADES
Por eso ayer al distinguir a Cleónico, que arrojó su escudo para huir,
al verle tan cobarde se cambiaron en ciervos.
SÓCRATES
Y ¿ves ahora? Al mirar a Clístenes se han transformado en mujeres.
ESTREPSÍADES
¡Salud, oh diosas! Si alguna vez lo habéis hecho por un mortal,
romped vuestro silencio y dejad oír vuestra celeste voz, reinas
omnipotentes.
CORO
Salud, investigador de la sabiduría: y tú, sacerdote de las vaciedades
más inútiles, di para qué nos necesitas. Porque a ningún sofista de
los que investigan las cosas del cielo escuchamos con tanto placer
como a ti, excepto a Pródico: a éste le atendemos por su ingenio y
por su ciencia; a ti por tu andar arrogante, por tu mirar desdeñoso, tu
sufrimiento en caminar desnudo, y la majestad que imprimes a tu
fisonomía.
ESTREPSÍADES
¡Oh Tierra, qué voz tan sagrada, venerable y prodigiosa!
SÓCRATES
Es que ellas son las únicas diosas; todas las demás son pura ficción.
ESTREPSÍADES
Pero entonces, dime, por la sagrada Tierra: ¿Zeus olímpico no es
dios?
SÓCRATES
¿Cuál Zeus? Tú te burlas. No hay tal Zeus.
ESTREPSÍADES
¿Qué estás diciendo? ¿,Pues quién hace llover? Demuéstrame esto
antes de todo.
SÓCRATES
Ellas: y voy a demostrarlo con grandes razones. ¿Has visto alguna
vez que Zeus haga llover sin Nubes? Si fuese él, sería necesario que
lloviese estando el cielo sereno y después de haberlas disipado.
ESTREPSÍADES
Perfectamente: por Apolo, tu argumento me ha convencido. Yo
creía antes, como cosa cierta, que Zeus para hacer llover orinaba en
una criba. Pero dime: ¿quién produce el trueno? Esto me hace
temblar.
SÓCRATES
Las Nubes truenan cuando se revuelven sobre sí mismas.
ESTREPSÍADES
¿De qué manera, hombre audaz?
SÓCRATES
Cuando están muy llenas de agua y se ponen en movimiento
arrastradas por su propio peso, al caer se entrechocan y rompen con
estrépito.
ESTREPSÍADES
Pero ¿quién las empuja para que se entrechoquen? ¿Acaso Zeus?
SÓCRATES
De ningún modo: las empuja el Torbellino etéreo.
ESTREPSÍADES
¿El Torbellino? En verdad, ignoraba que Zeus no existía y que
reinaba por él el Torbellino. Pero nada me has enseñado todavía de l
fragor de los truenos.
SÓCRATES
¿No me has oído decir que cuando las Nubes llenas de agua caen
unas sobre otras producen ese fragor a causa de su densidad?
ESTREPSÍADES
¿Y cómo he de creer eso?
SÓCRATES
Observando lo que a ti mismo te sucede, como voy a demostrarte.
Cuando en las Panateneas cenas tanto que se te desarregla el vientre;
¿no has notado que éste produce de repente algunos ruidos?
ESTREPSÍADES
Sí a fe mía: y en seguida me atormenta, y se revuelve, ruge como el
trueno, y después estalla con estrépito. Primero hace, con ruido
apenas perceptible, pax; luego papax, en seguida papappax, y
cuando hago mis necesidades es un verdadero trueno pappappax, lo
mismo que las Nubes.
SÓCRATES
Considera el gran ruido que haces con tu pequeño vientre: ¿será,
pues, inverosímil el que el aire inmenso truene con estrepitoso
fragor? Por eso las palabras trueno y ventosidad son semejantes.
ESTREPSÍADES
Pero dime: ¿de dónde provendrá el rayo resplandeciente que a unos
los reduce a cenizas y a otros los toca sin matarlos? Evidentemente
Zeus es quien lo lanza contra los perjuros.
SÓCRATES
Pobre tonto, más viejo que el tiempo, la luna y el pan! ¿Cómo, si
hiere a los perjuros. no ha abrasado ni a Simón, ni a Cleónimo, ni a
Teoro? Éstos son no poco perjuros. Sin embargo, vemos que hiere a
su propio templo, al promontorio Sunio, y a las gigantescas encinas.
¿Por qué causa? Una encina jamás es perjura.
ESTREPSÍADES
No lo sé, pero me parece que discurres bien. Pero dime: ¿qué es el
rayo?
SÓCRATES Si un viento seco se eleva y se encierra dentro de las Nubes, las hincha como si fueran una vejiga; después cuando su misma fuerza las revienta se escapa violentamente comprimido por su densidad, y el ímpetu terrible con que estalla hace que se encienda a sí mismo.

ESTREPSÍADES En verdad, lo mismo me sucedió una vez en las fiestas de Zeus. Asaba para mi familia un vientre sin haber tenido la precaución de hacerle algunas incisiones; se había hinchado mucho, y de repente reventó por medio y me saltó a los ojos su interior quemá ndome la cara.

CORO ¡Oh tú que deseas aprender los arcanos de la ciencia, cuán dichoso serás entre los Atenienses y los demás Griegos si tienes memoria y aplicación y un alma constante para el sufrimiento; si no te cansas ni de permanecer quieto, ni de caminar; si no te hace mella el frío, ni deseas comer; si te abstienes del vino, de los ejercicios gimnásticos y de otras necedades, y piensas que es lo mejor y lo más propio de un hombre digno el sobresalir en las obras, en los consejos y en los combates de la palabra!
ESTREPSÍADES Si te hace falta un alma dura e insensible a los desveladores cuidados, y un estómago frugal acostumbrado a las privaciones y capaz de alimentarse con ajedrea, puedes contar conmigo; mi cuerpo es tan duro como un yunque.

SÓCRATES Promete también no reconocer ya más dioses que los que nosotros veneramos en concepto de tales; a saber: el Caos, las Nubes y la Lengua; he aquí las tres divinidades.

ESTREPSÍADES
Nunca hablaré de otras aunque me tropezase con ellas, ni las
honraré con sacrificios, libaciones ni incienso.
CORO
Pide ahora confiadamente lo que deseas de nosotros, y lo obtendrás,
si nos honras, nos admiras y procuras ser hombre hábil.
ESTREPSÍADES
¡Oh dioses! Lo que os pido es lo menos que puede pedirse; haced
tan sólo que sea el más elocuente de los Griegos.
CORO
Concedido: ningún hombre de estos tiempos te superará en hacer
bellos discursos.
ESTREPSÍADES
No: eso no es lo que deseo, porque, a mí jamás se me ocurre
pronunciar grandes sentencias. Tan sólo quiero resolver en mi favor
los pleitos y escapar de las manos de los acreedores.
CORO
Se cumplirá lo que deseas, pues no apeteces cosas imposibles. Ponte
confiadamente en manos de uno de nuestros sacerdotes.
ESTREPSÍADES
Haré lo que me mandáis, pues la necesidad aprieta por causa de los
caballos y el matrimonio, que me han perdido. Hagan éstos de mí
ahora todo cuanto les plazca; yo les entrego mi cuerpo para que lo
destrocen a fuerza de golpes, hambre, sed, calor y frío, y si quieren
conviertan mi piel en una bota, con tal que no pague mis deudas y
pase por hombre atrevido, charlatán, temerario, sin vergüenza,
costal de mentiras, inventor de frases, trillado en los pleitos,
litigante perpetuo, molino de palabras, zorro astuto, penetrante
barreno, correa flexible, disimulado, escurridizo, fanfarrón,
insensible como el nudo de las maderas, impuro, veleta, y parásito
impudente. Si todos los que me encuentran, llegan a saludarme con
todos estos calificativos, hagan mis maestros cuanto les agrade de
mi persona; y si les gusta, por Demeter, embutan mis intestinos y
sírvanselos a los filósofos.
CORO
Este hombre tiene una voluntad pronta y valiente. Ten entendido
que la ciencia que te vamos a enseñar te hará conseguir tal gloria
entre los mortales, que te levantará hasta el ci elo.
ESTREPSÍADES
Y ¿qué me Sucederá?
CORO
Que mientras vivas, gozarás con nosotras una existencia
extremadamente feliz.
ESTREPSÍADES
¿Acaso llegaré a ver eso?
CORO
Habrá constantemente muchos sentados a tu puerta, deseando
consultarte, hablar contigo y deliberar sobre infinitos pleitos y
negocios en que se cruzarán sumas inmensas. (A Sócrates) Pero
enseña al viejo algunas de tus lecciones, sondea su espíritu y explora
los alcances de su ingenio.
SÓCRATES
Ea, dime qué clase de carácter tienes, para que, una vez conocido,
pueda dirigir contra él nuevas máquinas.
ESTREPSÍADES
¡Cómo! ¿Acaso piensas asaltarme como si fuera una muralla?
SÓCRATES
No: solamente quiero hacerte algunas breves preguntas. En primer
lugar, ¿tienes memoria?
ESTREPSÍADES
Sí, por cierto, y de dos clases. Si me deben, tengo una memoria
excelente; pero si debo ¡pobre de mí! soy muy olvidadizo.
SÓCRATES
¿Tienes alguna disposición natural para la elocuencia?
ESTREPSÍADES
Para la elocuencia no, pero sí para el fraude.
SÓCRATES
Entonces ¿cómo podrás aprender?.
ESTREPSÍADES
Perfectamente, no te inquietes por eso.
SÓCRATES
Ea, manos a la obra; en cuanto yo te proponga alguna cuestión sobre
las cosas celestes, te apoderas de ella inmediatamente.
ESTREPSÍADES
¡Qué! ¿Es preciso atrapar la sabiduría como un perro arrebata una
tajada?
SÓCRATES
¡Vaya un hombre ignorante y bárbaro! Me parece, anciano, que vas
a necesitar algún correctivo. Vamos a ver, ¿qué haces cuando
alguno te apalea?
ESTREPSÍADES
Me dejo apalear; después tomo testigos; en seguida ejercito mi
acción ante el tribunal.
SÓCRATES
Ea, quítate el vestido.
ESTREPSÍADES
¿Te he ofendido en algo?
SÓCRATES
No; pero la costumbre es entrar desnudo48 .
ESTREPSÍADES
Yo no vengo aquí a buscar ninguna cosa robada49 .
SÓCRATES
Abajo el vestido. ¿A qué decir tantas sandeces?
ESTREPSÍADES
Dime sólo una cosa. Si soy muy aplicado y estudio con grande afán
¿a cuál de tus discípulos me pareceré?
SÓCRATES
Serás enteramente semejante a Querefón.
ESTREPSÍADES
¡Ay desgraciado de mí! Entonces seré un cadáver ambulante.
SÓCRATES
No charles tanto. Apresúrate y sígueme hacia ese lado
ESTREPSÍADES
Dame antes una torta de miel, porque, al entrar ahí, siento tanto
miedo como si bajase a la cueva de Trofonio50 .
__________________________
48 Como en los misterios.
49 El que penetraba en una casa para buscar un objeto que le había sido robado y que suponía se hallaba escondido debía, para evitar fraude, despojarse de sus vestidos.
____________
SÓCRATES
Anda: ¿por qué te detienes en la puerta?
CORO
Marcha regocijado, sin que disminuya tu valor por eso. Ojalá tenga
feliz éxito la empresa de este hombre, que en edad provecta ilustra
su inteligencia con ideas nuevas y cultiva la sabiduría51 .
Espectadores, os diré francamente la verdad; lo juro por Baco, de
quien soy discípulo. Así salga yo vencedor y sea tenido por sabio,
como es cierto, que creyéndoos personas de buen gusto sometí por
primera vez a vuestra aprobación esta comedia, la mejor de las mías,
trabajada con exquisito esmero. Y sin embargo, a pesar de no
merecer tal desgracia, fui vencido por rivales ineptos. Por esto me
quejo de vosotros, ilustrados jueces, a quienes dediqué mis trabajos.
Pero no por tal motivo he de recusar la opinión de los doctos, ante
quienes es tan agradable comparecer, y que oyeron con tanta
complacencia a mi Prudente y mi Deshonesto52 cuando yo, virgen
aún porque no me era lícito parir53 expuse el fruto de mi ingenio,
que recogido por otra madre54 fue educado liberalmente por
vosotros; desde lo cual creía tener asegurada vuestra benevolencia.
Ahora, pues, se presenta mi Comedia como una nueva Electra
buscando con la vista a aquellos sabios espectadores; y de seguro
que reconocerá, en cuanto lo vea, el rizo de su hermano. Reparad la
decencia de sus costumbres. Es la primera que aparece en la escena
sin venir armada de un instrumento de cuero, rojo por la punta,
grueso y a propósito para hacer reír a los niños55; que no se burla de


____________________________________
50 Con objeto de impedir el que pudieran ser reconocidos los resortes de la cueva de este célebre oráculo, los que penetraban en ella llevaban las manos ocupadas con tortas de miel para evitar,según decían los sacerdotes, las mordeduras de las serpientes.
51 Principia la parábasis.
52 Personajes de la primera comedia de Aristófanes Los convidados.
53 No tenía edad suficiente para estrenar comedias.
54 Alude a Filónides y Calístrato, que presentaron como suya la primera comedia de Aristófanes.
55 Descripción del falo.
_________________


los calvos ni baila el córdax56; que no introduce un viejo golpeando con su bastón a todos los que encuentra para disimular la grosería de sus chistes, ni asalta la escena agitando una antorcha y gritando ¡Jo! ¡Jo!; ni confía más que en sí misma y sus versos. Y yo, que soy su autor, ciertamente no me enorgullezco57 por tal cosa, ni procuro engañaros, presentándola dos y tres veces. Sino que siempre invento comedias nuevas, que no se parecen entre sí y son todas bellas e ingeniosas. Cuando Cleón estaba en todo su poder yo le he atacado frente a frente58, pero en cuanto cayó cesé de insultarle. Los demás poetas, desde que Hipérbolo dio el ejemplo, atacan sin cesar al desgraciado sin perdonar ni a su madre. El primero de todos fue Éupolis, el cual presento en escena su Maricás que no era otra cosa que un mal arreglo de mis Caballeros; sólo añadió una vieja embriagada que bailase el córdax, personaje inventado mucho tiempo hace por Frínico59, que la exponía a la voracidad de un monstruo marino. Después Hermipo presentó a Hipérbolo; y todos los demás cayeron sobre Hipérbolo imitando mi comparación de las anguilas. ¡Ojalá los que ríen en sus comedias no se diviertan con las mías! En cuanto a vosotros, que os deleitáis con mi persona einvenciones, seréis considerados en el porvenir como personas de buen gusto.
SEMICORO Invoco primeramente en favor de este coro al gran Zeus, rey del cielo y señor de los dioses; después al prepotente numen cuyo tridente irresistible conmueve la tierra y los salados mares; y a ti,nuestro ilustre padre, venerable Éter, alma de todas las cosas; y a ti,oh Sol, domador de corceles, que vivificas la tierra con tus brillantes rayos, y eres divinidad poderosa entre los inmortales y los hombres.


____________________________
56 Baile lascivo usado en la comedia antigua.
57 El verbo Ko¡áw significa enorgullecerse y tener buenos cabellos. Aristófanes era calvo, por lo cual esta palabra es muy graciosa en sus labios.
58 Literalmente: "Le he herido en el vientre". Alude a Los caballeros.
59 Frínico el comediógrafo.
_______


CORO Sabios espectadores, parad en esto la atención.. Nos quejamos de la injusticia con que nos tratáis; puesto que recibiendo de nosotras vuestra ciudad más beneficios que de todos los demás dioses, sin embargo, ni sacrificáis ni hacéis libaciones en honor de vuestras conservadoras. Si sedecreta alguna expedición insensata, inmediatamente tronamos o llovemos. Cuando elegisteis general al zurrador Paflagonio60, enemigo de los dioses, fruncimos las cejas y dimos muestras de grande indignación; brilló el rayo acompañado de los estallidos del trueno; la luna abandonó su acostumbrado camino; y el sol61, retirando su antorcha, negó sus resplandores a la tierra si Cleón era general. Sin embargo, le elegisteis, y desde entonces dicen que todas vuestras determinaciones son desacertadas,pero que los dioses convierten en buenas las faltas que cometéis. Os enseñaremos fácilmente la manera de aprovecharos de esto: apoderaos de Cleón, de esa paviota voraz, y, después de condenarle por ladrón y sobornador, encabrestadlo y ahorcadlo contra una viga: de esta manera repararéis vuestra falta y conseguiréis que produzca resultados en favor de la república.

SEMICORO Acude tú también, Febo soberano, dios de Delos, habitante de las elevadas y rocallosas cumbres del Cintio; y tú, Ártemis inmortal,que tienes en Éfeso templo de oro, donde te sirven magníficamente las hijas de los Lidios; y tú, Atenea, diosa de nuestra patria, señora de la égida, patrona de esta ciudad; y tú alegre Baco, que vagas por la cima del Parnaso, al resplandor de las teas, entre las bacantes de Delfos.
CORO Cuando íbamos a marchar, la luna se ha acercado a nosotros y nos ha encargado en primer lugar que saludemos a los Atenienses y a



_______________
60 Cleón, en Los caballeros.
61 Aristófanes parece aludir al eclipse que, según Tucídides, tuvo lugar el año octavo de la guerra del Peloponeso a la hora del medio día.

________________________
sus aliados. Después se ha mostrado enojada por la manera atroz
con que la habéis tratado, cuando ella os presta mil servicios no de
palabra sino de obra. Primeramente os economiza lo menos un
dracma de luz cada mes; puesto que todos los que salen al oscurecer
dicen a su criado: "No compres antorchas porque la luz de la luna es
muy hermosa". También dice que os hace otros muchos beneficios.
Vosotros, en cambio, alteráis de un modo lamentable el orden de los
días62 . Así es que en todos ellos tiene que sufrir las quejas, de los
dioses cuando vuelven a sus palacios frustradas sus esperanzas de
una cena, que debía ofrecérseles según el primitivo orden de los
días. Cuando es ocasión de hacer sacrificios, os halláis ocupados en
los tribunales. Cuando una ayuna llorando la muerte de Memnón o
Sarpedón63, otros ríen y beben. Por eso nosotras hemos arrebatado
su corona a Hipérbolo cuando designado por la suerte acudía esta
año a la asamblea de los Anfictiones. Así aprenderá a arreglar los
días conforme a las revoluciones de la luna.
SÓCRATES
Juro por la respiración, por el caos y por el aire, no haber visto
nunca un hombre tan grosero, tan estúpido y tan olvidadizo Las
sutilezas más sencillas las olvida antes de haberlas aprendi do Sin
embargo, le llamaré a la luz del día. ¡Hola, Estrepsíades! Sal aquí y
tráete la cama.
ESTREPSÍADES
No me dejan llevarla las chinches.
SÓCRATES
Colócala pronto y préstame atención.
ESTREPSÍADES
Heme aquí.


_________________
62 Este pasaje alude probablemente a la confusión que se introdujo en el calendario griego por causa del arreglo hecho por el astrónomo Metón.
63 Hijos de Zeus.
____
SÓCRATES
¡Aa! dime: ¿cuál de las cosas que ignoras quieres aprender primero:
los versos, la medida o el ritmo?
ESTREPSÍADES
La medida. Precisamente un comerciante de harina me defraudó el
otro día dos kénices64 .
SÓCRATES
No te pregunto eso; sino qué medida te parece más hermosa, la de
tres o la de cuatro65 .
ESTREPSÍADES
Ninguna hay mejor que el semisextario66 .
SÓCRATES
¡Pobre hombre! Sólo dices necedades.
ESTREPSÍADES
¿Qué apuestas a que el semisextario es la medida de cuatro?
SÓCRATES
¡ve enhoramala! ¡Cuidado que eres díscolo y grosero! Vamos a ver
si aprendes con más facilidad algo del ritmo.
ESTREPSÍADES
¿De qué me servirá el ritmo para vivir?

____________________
64 El Kénice ático (Xoiivu.) equivalía a litros 1,08.
65 Literalmente el trímetro o el tetrámetro. Sócrates habla de la medida de los versos, y Estrepsíades entiende la medida ordinaria.
66 El semisextario (f ¡ícKrov) valía cuatro kénices, lo que en Sentir del viejo equivale al tetrámetro.
________________________

SÓCRATES
Serás amable y chistoso cuando conozcas el ritmo enoplio67 y el del
dáctilo.
ESTREPSÍADES
¿El del dáctilo? Por Zeus, ya le conozco.
SÓCRATES
Pues dilo.
ESTREPSÍADES68
Éste. Cuando era joven me servía de este otro.
SÓCRATES
Eres tonto y grosero.
ESTREPSÍADES
Pero, desdichado, ¡si yo no quiero aprender ninguna de esas cosas!
SÓCRATES
¿Pues cuáles quieres?
ESTREPSÍADES
Aquel, aquel razonamiento injusto.
SÓCRATES
Pero antes es necesario aprender otras cosas. En primer lugar tienes
que saber cuáles son los animales machos.
ESTREPSÍADES
¿Pues no lo sé, o acaso estoy loco? El carnero, el cabrán, el toro, el
perro, el faisán...69
__________________________________
67 El ritmo enoplio se componía de dos dáctilos y un espondeo.
68 Dáctilo significa dedo. Estrepsíades usa esta palabra en un
doble sentido, que debía comprenderse por medio de la acción.
______________

SÓCRATES
¿Ves lo que haces? Llamas faisán a la hembra lo mismo que al
macho.
ESTREPSÍADES
¿Cómo es eso?
SÓCRATES
¿Cómo? Faisán y faisán.
ESTREPSÍADES
Verdad es lo que dices, por Posidón ¿Pero de qué modo llamaré a la
hembra?
SÓCRATES
Faisana y al otro faisán.70

ESTREPSÍADES
Faisana. Tienes razón, por el Aire. Sólo por eso he de llenar de trigo
tu troj71 .
SÓCRATES
Nueva falta. Haces masculino un nombre femenino.
ESTREPSÍADES
¿Cómo hago masculina la troj?
SÓCRATES
Lo mismo que diciendo Cleón72
___________________________
69 En griego, a AcKrpvwÉv -(gallo). Hacemos esta variación para que se entienda con más facilidad lo siguiente.
70 AAcKrcpvÉaLvav rov b cxrcpov aAcÉKropa.
71 Lit.: de harina tu artesa. Como todos los argumentos de Sócrates se fundan en tener Kápbo:o (artesa) terminación masculina no obstante ser del género femenino, hemos tenido que buscar un equivalente para hacer inteligible el pasaje.

__________________________________
ESTREPSÍADES
¿Por qué razón? Explícate.
SÓCRATES
Dices troj lo mismo que Cleón.
ESTREPSÍADES
Pero, querido, si Cleón no tenía troj y amasaba la harina en un
mortero redondo. Acabemos. ¿Cómo deberé decir?
SÓCRATES
¿Cómo? Diciendo troja como dices Sóstrata.
ESTREPSÍADES
¡Troja!
SÓCRATES
Así está bien.
ESTREPSÍADES
De modo que debe decirse troja, Cleona.
SÓCRATES
También debes aprender a distinguir en los nombres de las personas
cuáles son masculinos y cuáles femeninos.
ESTREPSÍADES
Conozco perfectamente los que son femeninos.
SÓCRATES
Di algunos.
ESTREPSÍADES
Lisila, Fina, Clitágora, Demetria.
________________
72 El texto original dice: Cleónimo
_____________
SÓCRATES
¿Y qué nombres son masculinos?
ESTREPSÍADES
Muchísimos. Filóxeno, Melexias, Aminias.
SÓCRATES
Pero, tonto, ésos no son masculinos.
ESTREPSÍADES
¿No son masculinos para vosotros?
SÓCRATES
De ninguna manera. ¿Cómo dirás para llamar a Aminias?
ESTREPSÍADES
¿Cómo diré? así: ¡Aminia! ¡Aminia!73

SÓCRATES
¿Lo ves? Ya llamas a Aminias como si fuera una mujer.
ESTREPSÍADES
¿Y no es justo llamar así al que no va al ejército? ¿Pero para qué
aprendo lo que todos sabemos?
SÓCRATES
Para nada, en verdad. Pero acuéstate ahí...
ESTREPSÍADES
¿Qué hago?
SÓCRATES
Pensar un Poco en tus asuntos.

_______________________
73 El vocativo de Aminias tiene en griego terminación igual a la femenina
__
ESTREPSÍADES
Por favor, no me mandes tenderme en esa cama Si es de todo punto
preciso el acostarse, déjame meditar sobre el duro suelo.
SÓCRATES
Eso es imposible
ESTREPSÍADES
¡Infeliz de mí, cuánto me van a atormentar hoy las chinches!
SÓCRATES
Medita y reflexiona; reconcentra tu espíritu, y hazle discurrir en
todos sentidos. Cuando tropieces con alguna dificultad, pasa
inmediatamente a otro asunto, y así el dulce sueño huirá de tus
párpados.
ESTREPSÍADES
¡Ay! ¡Ay! ¡Ay!
SÓCRATES
¿Qué te pasa? ¿Qué te aflige?
ESTREPSÍADES
Perezco miserablemente; las chinches, que brotan de esta cama, me
muerden, me desgarran los costados, me chupan la sangre, me
ulceran todo el cuerpo74 y me matan.
SÓCRATES
No te quejes tan fuerte.
ESTREPSÍADES
Cómo no he de gritar si he perdido mis bienes, mi sangre, mi alma y
mis zapatos, y para colmo de males voy a perder aquí lo poco que
me queda.
_______________
74 Et testículos evellunt, et culum perfodiunt.
_____________
SÓCRATES
¡Eh, tú! ¿qué haces? ¿No meditas?
ESTREPSÍADES
Sí, por Posidón.
SÓCRATES
¿Y en qué piensas?
ESTREPSÍADES
Pienso en si dejarán algo de mí las chinches.
SÓCRATES
Te perderás sin remedio.
ESTREPSÍADES
¡Pero, buen hombre, si ya estoy perdido!
SÓCRATES
No desfallezcas, y envuélvete bien. Es preciso discurrir algún
fraude, algún paliativo.
ESTREPSÍADES
¡Ay! ¿Quién me arrojará como paliativo una piel de carnero?
SÓCRATES
Ea, veré primeramente lo que hace éste. ¡Hola! ¿duermes?
ESTREPSÍADES
No, por Apolo.
SÓCRATES
¿Tienes algo?
ESTREPSÍADES
Nada tengo.
SÓCRATES
¿Nada absolutamente?
ESTREPSÍADES
Nada más que esto75

SÓCRATES
Cúbrete y discurre algo.
ESTREPSÍADES
¿Sobre qué? Contesta, Sócrates.
SÓCRATES
Di tú lo que quieres hallar primeramente
ESTREPSÍADES
¿No lo has oído mil veces? Quisiera hallar el medio de no pagar los
intereses a ningún usurero
SÓCRATES
Pues manos a la obra, cúbrete, fija tu inteligencia en un pensamiento
sutil y estudia minuciosamente el asunto, distingue bien sus
diferentes partes y reflexionando sobre ellas.
ESTREPSÍADES
¡Ay de mí!
SÓCRATES
Tranquilízate; si tropiezas con alguna dificultad, sepárate de ella; y
en seguida vuelve al mismo pensamiento y reflexiona sobre él.
ESTREPSÍADES
¡Ay, queridísimo Sócrates!

_________________
75 Nihil, nisi penem hunc, quem teneo aextera.
___________________
SÓCRATES
¿Qué pasa, anciano?
ESTREPSÍADES
Ya he dado con un medio de no pagar los intereses.
SÓCRATES
Manifiéstalo.
ESTREPSÍADES
Di: ¿si yo comprase una hechicera de la Tesalia, que
hiciera bajar de noche a la luna y la guardase después encerrada en
una caja redonda, como si fuera un espejo...?
SÓCRATES
¿Para qué puede servirte...?
ESTREPSÍADES
¿Para qué? si la luna no volviese a salir, yo no tendría que pagar
más intereses.
SÓCRATES
¿Cómo?
ESTREPSÍADES
Porque los intereses se pagan cada mes.
SÓCRATES
Perfectamente. Pero yo voy a proponerte otra astucia. Dime: si se
dicta contra ti una sentencia que te condena al pago de cinco
talentos, ¿cómo te arreglarás para que desaparezca?
ESTREPSÍADES
¿Cómo? ¿cómo? No sé; pero es preciso hallar un medio.
SÓCRATES
No concentres siempre el pensamiento dentro de ti mismo; dale
suelta y déjalo volar como un escarabajo a quien se ata un hilo al pie
para que no se escape.
ESTREPSÍADES
He hallado un medio ingeniosísimo para anular la sentencia; tú vas a
ser de mi opinión.
SÓCRATES
¿Cuál?
ESTREPSÍADES
¿Has visto alguna vez en la tienda de los droguistas una piedra
hermosa y diáfana, que sirve para encender fuego?
SÓCRATES
¿Hablas del cristal?
ESTREPSÍADES
Del mismo.
SÓCRATES
Y bien, ¿qué harías?
ESTREPSÍADES
Cogería el cristal, y cuando el escribano escribiera la sentencia, yo,
permaneciendo bastante separado, derretiría76 al sol el documento
que me condenaba.
SÓCRATES
Ingeniosísimo, por las Gracias.
______________________________
76 Se escribía sobre tablas cubiertas de una ligera capa de cera.
______________
ESTREPSÍADES
¡Qué placer, borrar una sentencia que me condena al pago de cinco
talentos!
SÓCRATES
Vamos a ver si encuentras pronto esto.
ESTREPSÍADES
¿Qué?
SÓCRATES
El modo de contradecir la petición del demandante en un juicio,
cuando ya vas a ser condenado, por falta de testigos.
ESTREPSÍADES
Eso es sumamente fácil.
SÓCRATES
Veamos.
ESTREPSÍADES
Cuando no quedase por sentenciar más que un pleito antes del mío,
correría a ahorcarme.
SÓCRATES
Eso nada vale.
ESTREPSÍADES
¿Pues no ha de valer? Por los dioses, ¿quién me pondría pleito
después de mi muerte?
SÓCRATES
Desvarías. Vete de aquí; no quiero enseñarte más.
ESTREPSÍADES
Por los dioses querido Sócrates, dime la causa.
SÓCRATES
Porque olvidas al instante todo cuanto se te enseña. y si no, dime:
¿qué era lo que has aprendido primeramente?
ESTREPSÍADES
Veamos: ¿qué era lo primero? ¿Qué era aquello en que
guardábamos el trigo?... ¡Ay de mí! ¿Qué era?
SÓCRATES
Veamos: ¿qué era lo primero?... ¿Qué era aquello en túpido de todos
los viejos?
ESTREPSÍADES
¡Ah desdichado! ¿Qué será de mí? Soy perdido, por no haber
aprendido a manejar bien la lengua. Vosotras, oh Nubes, dadme
algún buen consejo.
CORO
Nosotras, anciano, te aconsejamos que si tienes educando a algún
hijo lo envíes para que estudie por ti.
ESTREPSÍADES
Tengo un hijo bueno y hermoso; pero no quiere estudiar. ¿Qué haré?
CORO
¿Y tú toleras eso?
ESTREPSÍADES
Es vigoroso y de buena constitución, y desciende por parte de madre
de la noble familia de Cesira. Me dirigiré a él, y si se niega, no
como pan hasta que no lo eche de casa. Entra, tú, adentro y
espérame un poco.
CORO
¿Reconoces77 que nosotras te proporcionamos más bienes que todos
los demás dioses? Porque ése está dispuesto a hacer todo cuanto le
mandes. El pobre hombre queda atónito y deslumbrado por tu
ingenio; procura sacar de él todo cuanto puedas, y que sea pronto,
porque no suelen durar mucho tan buenas disposiciones.
ESTREPSÍADES
No, no permanecerás más en esta casa, lo juro por la Niebla: lárgate,
y cómete las colmenas78 de tu tío Megacles.
FIDÍPIDES
¡Desgraciado! ¿Qué te pasa, padre mío? Por Zeus olímpico, tú has
perdido el seso.
ESTREPSÍADES
¡Mira, mira "Zeus olímpico"! ¡Qué estupidez! ¿A tu edad crees en
Zeus olímpico?
FIDÍPIDES
¿De qué te ríes?
ESTREPSÍADES
De verte tan chiquillo dando crédito a todas esas vejeces. Acércate y
sabrás muchas cosas: y aun te diré alguna que en cuanto la sepas te
sentirás convertido en hombre; pero no se la digas a nadie.
FIDÍPIDES
Heme aquí. ¿Qué es ello?
ESTREPSÍADES
Acabas de jurar por Zeus.
77 Dirigiéndose a Sócrates.
78 Por ser lo que le resta de su antigua opulencia.
FIDÍPIDES
Es cierto.
ESTREPSÍADES
¡Mira que bueno es estudiar! No existe Zeus, querido Fidípides.
FIDÍPIDES
¿Pues quién?
ESTREPSÍADES
Reina el Torbellino, que ha expulsado a Zeus.
FIDÍPIDES
¿Qué estás disparatando?
ESTREPSÍADES
Sabe que es como te digo.
FIDÍPIDES
¿Quién dice eso?
ESTREPSÍADES
Sócrates el Meliense79, y Querefón, que conoce las huellas de una
pulga.
FIDÍPIDES
¿Tan adelante has ido en tu locura que das crédito a esos
atrabiliarios?
ESTREPSÍADES
Contén la lengua, y no murmures de esos hombres hábiles e
inteligentes que, por economía, ni se rasuran, ni se perfuman, ni van
nunca al baño para lavarse; mientras que tú disipas mis bienes,
como si ya hubiese muerto. Pero ve cuanto antes y aprende por mí.
79 Sócrates era de Atenas; pero Aristófanes le llama Meliense, porque el ateo Diágoras era natural de Melo (Milo).
FIDÍPIDES
¿Qué cosa buena puede aprenderse de ellos?
ESTREPSÍADES
Toda la sabiduría humana. Tú mismo has de conocer lo ignorante y
estúpido que eres. Pero espérame aquí un momento80 .
FIDÍPIDES
¡Ah! ¿qué haré? Mi padre está loco. ¿Le argüiré de demencia en los
tribunales, o noticiaré su enfermedad a los confeccionadores de
ataúdes?
ESTREPSÍADES
Vamos a ver: ¿cómo llamas a este pájaro?
FIDÍPIDES
Faisán.
ESTREPSÍADES
Bien, ¿y a esta hembra?
FIDÍPIDES
Faisán.
ESTREPSÍADES
¿Los dos lo mismo? eso es ridículo. En adelante no hables. Llama a
ésta faisana y a aquél faisán.
FIDÍPIDES
¿Faisana dices? ¿Ésas son las grandes cosas que has aprendido de
los hijos de la Tierra?
80 Entra un momento en la casa, de donde sale con un gallo y una gallina en la mano, que aquí sustituimos por una pareja de faisanes, y repite la lección que antes recibió de Sócrates.
ESTREPSÍADES
Y otras muchas; pero a causa de mis años cuando aprendía algo se
me olvidaba en seguida.
FIDÍPIDES
¿Por eso has perdido tu vestido?
ESTREPSÍADES
No lo he perdido; lo he dejado en la escuela.
FIDÍPIDES
¿Y qué has hecho de tus zapatos, pobre tonto?
ESTREPSÍADES
Los he perdido, como Pericles81, en lo que era necesario. Ea, anda,
marchemos: si obedeces a tu padre, podrás delinquir sin cuidado
alguno. No habías cumplido seis años, y aun balbuceabas, cuando
yo te compré en las fiestas de Zeus un carrillo con el primer óbolo
que gané administrando justicia en el Heliástico.
FIDÍPIDES
Algún día te pesará lo que haces.
ESTREPSÍADES
Bien, ya me obedeces. ¡He! Sócrates, sal aquí pronto; te traigo a mi
hijo, a quien he convenido a duras penas.
SÓCRATES
Éste es un mozo inexperto y no acostumbrado a nuestros cestos
colgantes.
FIDÍPIDES
Más acostumbrado estarías tú si te colgases.
81 Alusión a la frase análoga de Pendes al dar cuenta de los diez talentos gastados en sobornar a los generales espartanos.
ESTREPSÍADES
¿No te irás al infierno? estás insultando a tu profesor.
SÓCRATES
¡Si te colgases, ha dicho! ¡Qué horrible pronunciación! ¡qué abrir la
boca! ¿Cómo podrá aprender éste la manera de ganar un pleito, de
entablar una demanda y de destruir los argumentos del contrario?
Hipérbolo aprendió todo esto por un talento.
ESTREPSÍADES
No te apures y enséñale: porque tiene disposición natural. Cuando
era pequeñito, ya construía casas, esculpía naves, fabricaba carritos
de cuero y hacía ranas de cáscara de granada. Enséñale los dos
razonamientos, el bueno, cualquiera que sea, y el malo, que triunfa
del bueno por medio de la injusticia; o, por lo menos, enséñale el
razonamiento injusto.
SÓCRATES
Lo aprenderá de los mismos razonamientos.
ESTREPSÍADES
Yo me retiro. Acuérdate de ponerle en estado de refutar todos los
argumentos justos.
CORO82

EL RAZONAMIENTO JUSTO 83
Sal aquí y muéstrate a los espectadores, tú que eres tan descarado.
82 Los manuscritos indican que aquí interviene el Coro, pero no transcriben sus palabras. Aquí le correspondería cantar.
83 El Razonamiento justo y el injusto eran traídos a la escena en jaulas de mimbre como dos gallos preparados para reñir.
Los nombres de estos dos personajes podrían traducirse también la causa Justa y la Causa Injusta.
EL RAZONAMIENTO INJUSTO
Sea como gustes; al fin te derrotaré con más facilidad hablando ante
la multitud.
EL JUSTO
¿Tú derrotarme? ¿Quién eres?
EL INJUSTO
Un razonamiento.
EL JUSTO
Sí, pero débil.
EL INJUSTO
Pues te venceré, aunque te crees más fuerte.
EL JUSTO
¿De qué modo?
EL INJUSTO
Inventando pruebas nuevas.
EL JUSTO
Eso está hoy de moda, gracias a esos necios.
EL INJUSTO
Di más bien a esos sabios.
EL JUSTO
Yo te derrotaré vergonzosamente.
EL INJUSTO
¿Cómo?
EL JUSTO
Diciendo lo que sea justo.
EL INJUSTO
Yo lo echaré todo por tierra contradiciéndote. En primer lugar niego
que hay justicia.
EL JUSTO
¿Dices que ni hay...?
EL INJUSTO
Claro; y si no, ¿dónde está?
EL JUSTO
Entre los dioses.
EL INJUSTO
Sí la justicia existe, ¿cómo es que Zeus no pereció cuando encadenó
a su padre?
EL JUSTO
¡Cómo! ¿Hasta ese extremo llega el mal? ¡Qué asco! traedme una
jofaina.
EL INJUSTO
Eres un viejo chocho e imbécil.
EL JUSTO
Y tú un bardaje sin vergüenza...
EL INJUSTO
Como si me cubrieras de rosas.
EL JUSTO
¡Payaso...!
EL INJUSTO
Me coronas de lirios.
EL JUSTO
Y parricida.
EL INJUSTO
Pero ¿no conoces que me empolvas con oro?
EL JUSTO
En otro tiempo esto te parecía plomo.
EL INJUSTO
Pues ahora me sirve de adorno.
EL JUSTO
¡Qué desvergonzado!
EL INJUSTO
¡Qué estúpido!
EL JUSTO
Por ti no frecuenta ningún joven las escuelas: ya conocerán algún
día los Atenienses lo que enseñas a esos necios.
EL INJUSTO
Tu suciedad me repugna.
EL JUSTO
Ahora eres rico, pero no ha mucho pedías limosna, y te comparabas
a Télefo de Misia, teniendo por única comida las sentencias de
Pandeletes que llevabas en tu alforja.
EL INJUSTO
¡Qué gran sabiduría...!
EL JUSTO
¡Qué gran locura...!
EL INJUSTO
¡Me estás recordando...!
EL JUSTO
La tuya y la de Atenas que alimenta al corruptor de la juventud.
EL INJUSTO
¿Pretendes educar a este joven, viejo chocho?
EL JUSTO
Claro está que sí, a no ser que quiera perderse y ejercitarse sólo en la
charlatanería.
EL INJUSTO
Acércate aquí y déjale que delire.
EL JUSTO
Te arrepentirás si le tiendes la mano.
CORO
Dejaos de riñas y de injurias, y declarad, tú lo que enseñabas a los
hombres de otra época, y tú la nueva doctrina; para que este joven,
oído y sentenciado este pleito, se decida por la que mejor le parezca.
EL JUSTO
Me place.
EL INJUSTO
A mí también.
CORO
Ea, ¿quién hablará primero?
EL INJUSTO
Concedo que principie éste; cuando haya hablado, yo me encargo de
destrozar sus dichos con palabras y pensamientos nuevos, agudos
como flechas; y por último, si aún se atreve a respirar, los rasgos de mi elocuencia le darán muerte, picándole toda la cara y los ojos,como si fueran tábanos.
CORO Vais a demostrar ahora por medio de artificiosas palabras, sutiles pensamientos y profundas sentencias cuál de vosotros es más hábil en el arte oratoria. Hoy se debaten grandes asuntos de la filosofía,por lo cual mis amigos libran un gran combate. Tú, que inspiraste alos antiguos tan Buenas costumbres, levanta la voz en defensa de tu causa favorita, y danos a conocer tu carácter.
EL JUSTO Voy a decir cuál era la educación antigua, en los tiempos florecientes en que yo predicaba la justicia, y la modestia reinaba en las costumbres. En primer lugar, era necesario que ningún niño pronunciase imperfectamente. Los que vivían en un mismo barrio iban a casa del maestro de música, recorriendo modestamente las calles desnudos y en buen orden, aunque la nieve cayese tan espesa corno la harina del cedazo: después se sentaban con las piernas separadas y se les enseñaba o el canto "Temible Palas, destructora de ciudades", o el que principia "Grito resonante a lo lejos", conservándoles el aire que les habían dado sus antepasados. Si alguno de ellos trataba de hacer alguna payasada, o cantar, imitando los modos de Quío y Sifnio, con las muelles inflexiones inventadas por Frinis84 , y que hoy gozan de tanta popularidad, era inmediatamente castigado con buenos azotes por enemigo de las Musas. En el gimnasio debían sentarse con las piernas extendidas para no enseñar ninguna indecencia; y cada cual al levantarse debía remover la arena, cuidando de no dejar a los amantes ninguna huella de su sexo. Ningún niño se ungía entonces más abajo del ombligo, floreciendo en sus vergüenzas un vello suave como el de las manzanas; ni se ofrecía por sí mismo a un amante con dulces inflexiones de voz y miradas lascivas. No les era permitido comer
84 Tañedor de lira, que obtuvo el primer premio en las Panateneas, siendo Arconte Calias.
rábanos, ni el anís, reservado a los viejos, ni apio, ni peces, ni tordos, poner una pierna sobre otra85 .
EL INJUSTO Todo esto es antiquísimo y coetáneo de las fiestas Diipolias86, llenas de cigarras87 del poeta Cécidas88 y de las Bufonias. EL JUSTO Sin embargo, ésta fue la educación que formó los héroes que pelearon en Maratón. Tú en cambio les enseñas a envolverse en seguida en sus vestidos; así es que me indigno, cuando, si les es necesario bailar en las Panateneas, veo a algunos cubriéndose con el escudo, sin cuidarse de Atenea. Por lo tanto, joven, decídete por mí sin vacilar; y aprenderás a aborrecer los pleitos, a no acudir a los baños públicos, a avergonzarte de las cosas torpes, a indignarte cuando se burlen de ti, a ceder tu asiento a los ancianos que se te acerquen, a conducirte bien con tus padres, y a no hacer nada deshonesto, porque debes de ser la imagen del pudor; a no extasiarte ante las bailarinas, no sea que mientras las miras como un papanatas alguna meretriz te arroje su manzana89 , con detrimento de tu reputación; a no contradecir a tu padre, ni, burlándote de tu vejez,recordar los defectos del que te ha educado.
EL INJUSTO Cree lo que éste dice, y, por Baco, te parecerás a los hijos de Hipócrates90, y te llamarán el tonto.

__________________________________
85 Estos alimentos se prohíben como afrodisíacos. Y el cruzar las piernas se consideraba postura poco decente.
86 Las fiestas Diipolias y Bufonias eran una misma en honor de Zeus Polieus o protector de la ciudad.
87 Alude a una moda antigua de Atenas, que consistía en sujetar los cabellos con una cigarra de oro.
88 Poeta ditirámbico muy antiguo.
89 Como prenda de amor.
90 Eran tres, tan notables por su estupidez, que fueron objeto de la burla de los poetas cómicos.
____________________________
EL JUSTO Brillarás en los gimnasios; no charlarás sandeces en la plaza pública, como hacen los jóvenes del día; ni entablarás pleitos por la cosa más pequeña, cuando pueden arruinarte las calumnias de tus adversarios. Sino que, bajando a la Academia, te pasearás con unsabio de tu edad bajo los olivos sagrados, ceñidas las sienes con una corona de caña blanca, respirando en la más deliciosa ociosidad el perfume de los tejos y del follaje del álamo blanco, y gozando de los hermosos días de primavera, en los que el plátano y el olmo confunden sus murmullos. Si haces lo que te digo, y sigues mis consejos, tendrás siempre el pecho robusto, el cutis fresco, anchas las espaldas, corta la lengua,gruesas las nalgas, y proporcionado el vientre91. Pero si te aficionas a las costumbres modernas, tendrás muy pronto color pálido, pecho débil, hombros estrechos, lengua larga, nalgas delgadas, vientre desproporcionado, y serás gran litigante. El otro te educará de tal modo que te parecerá torpe lo honesto, y honesto lo torpe, y por último, serás tan infame como Antímaco.
¡Qué grato perfume de virtud exhalan tus palabras, cultivador de la más sólida y elevada filosofía! ¡Dichosos hombres los que vivieron en la época de tu esplendor! Tú, que posees todos los recursos de la oratoria, es preciso que digas algo nuevo contra éste, que se ha hecho digno de alabanza. Necesitas ciertamente emplear recursos extraordinarios contra tu adversario, si quieres vencerle y no ser blanco de la burla de todos.
EL INJUSTO Hace tiempo que me abrasa la impaciencia, y ardo en deseos d e echar por tierra todos sus argumentos. Los filósofos me llaman injusto, porque soy el primero que he descubierto la manera de contradecir las leyes y el derecho; pero ¿no es una habilidad inestimable la de salir vencedor en la causa más débil? Verás cómo refuto su decantado sistema de educación. En primer lugar, te
______________
91 Penem.
__________
prohíbe los baños calientes. ¿En qué te fundas para vituperar los
baños calientes?
EL JUSTO
En que son perjudiciales y debilitan al hombre.
EL INJUSTO
Alto: ya estás cogido y no te escaparás. Dime: ¿cuál de los hijos de
Zeus ha sido el más esforzado y ha llevado a cabo más trabajos?
EL JUSTO
Creo que ninguno sobrepuja a Heracles.
EL INJUSTO
Y ¿dónde has visto baños fríos bajo la advocación de Heracles?92
Sin embargo ¿quién era el más esforzado?
EL JUSTO
Ésas son las razones que los jóvenes tienen siempre en la boca, y
gracias a ellas los baños están llenos y desiertas las palestras.
EL INJUSTO
También vituperas la costumbre de hablar en la plaza pública. Yo la
alabo. Porque, si eso fuese perjudicial, Homero no hubiera hecho
orador a Néstor, ni a todos los demás sabios. Pasemos al ejercicio de
la lengua: dice que los jóvenes no deben cultivarla; yo digo lo
contrario. También recomienda la modestia. En total, dos malos
consejos. Porque ¿a quién has visto que haya conseguido bien
alguno por medio de la modestia? Habla, refútame.
EL JUSTO
He visto muchos: por causa de ella recibió Peleo93 una espada.

______________________________________________________
92 Las fuentes de aguas termales se llamaban baños de Heracles.
93 Peleo recibió una espada de los dioses cuando fue expuesto sin armas al furor de las fieras, a causa de la calumnia de Hipólita.
EL INJUSTO
¡Una espada! ¡Linda ganancia tuvo el desdichado! Ahí tienes a
Hipérbolo, que gracias a su malicia y no a su espada ha ganado
muchos talentos vendiendo lámparas.
_______________________________


EL JUSTO
El mismo Peleo, por ser modesto, se casó con la diosa Tetis.
EL INJUSTO
Que se marchó muy pronto y le dejó solo; porque no era un hombre
violento, capaz de pasar toda la noche en dulces luchas de amor, que
es lo que agrada a las mujeres. Pero tú eres un viejo chocho.
Considera, joven, todas las contrariedades de la modestia, y de qué
placeres te privara; de los muchachos, de las mujeres, de los
juegos94, de los pecados, de beber y de reír. ¿Para qué quieres la
vida, privada de estos placeres? Basta de esto. Paso ahora a las
necesidades de la naturaleza. Has delinquido, has amado, has
cometido algún adulterio y eres cogido infraganti; ya eres hombre
muerto porque no sabes defender tu causa. Pero, conmigo goza sin
cuidado de la vida, baila, ríe, y nada te avergüence. Si eres
sorprendido con la mujer ajena, asegura al marido que no has
faltado; echa la culpa a Zeus que también fue vencido por el amor y
las mujeres. Tú siendo mortal, ¿cómo puedes ser más fuerte que el
padre de los dioses?.
EL JUSTO
y siguiendo tus lecciones, es condenado al castigo de los adúlteros95:
¿encontrará entonces algún argumento para demostrar que no es un
bardaje?
EL INJUSTO
Y aunque sea un bardaje, ¿qué mal hay en ello?

_______________________________________________________
94 Aristófanes nombra el Cótabo, por toda clase de juegos.
95 Véase el Escoliasta: Las nubes, 1083; Pluto, 168. De este castigo, que producía la euriproctia, se libraba el culpable mediante el pago de una multa.
_________________________________

EL JUSTO
¿Puede haber mal mayor?
EL INJUSTO
¿Qué dirás si también te venzo en este punto?
EL JUSTO
Me callaré; ¿qué podría hacer?
EL INJUSTO
Ea, dime: ¿a qué clase pertenecen los oradores?
EL JUSTO
A la de los bardajes96 .
EL INJUSTO
Lo creo. ¿Y los poetas trágicos?
EL JUSTO
A la de los bardajes.
EL INJUSTO
Tienes razón. ¿Y los demagogos?
EL JUSTO
A la de los bardajes.
EL INJUSTO
¿Ves cómo yo no hablaba tan neciamente? Mira ahora a qué clase
pertenecen la mayoría de los espectadores.
EL JUSTO
Ya miro.
96 E cvpv:poKrwvÉ.
EL INJUSTO
¿Qué ves?
EL JUSTO
Por los dioses, veo que los más son bardajes. Este que yo conozco,
ése, y aquel de los largos cabellos.
¿Qué dices ahora?
EL JUSTO
Son vencidos. ¡Bardajes, recibid mi manto; me paso a vosotros!
(Se retiran)
SÓCRATES
Y bien, ¿quieres llevarte a tu hijo, o dejarle para que le enseñe el
arte de hablar?
ESTREPSÍADES
Enséñale, castígale, y no te olvides de afilar bien su lengua, de
modo que uno de sus dos filos le sirva para los negocios de poca
monta, y el otro para los de mucha importancia.
SÓCRATES
Pierde cuidado; te lo enviaré hecho un completo sofista.
FIDÍPIDES
Bien pálido, me parece, y bien miserable.
CORO
Id, pues; creo que te arrepentirás algún día. (Entran en la escuela de
Sócrates) Queremos deciros, jueces, lo que ganaréis si nos otorgáis
la protección merecida. En primer lugar, al principio de la
primavera, cuando queráis labrar vuestras tierras lloveremos antes
para vosotros y en seguida para los demás; después, cuando vuestras
viñas tengan ya racimos, cuidaremos de que no las perjudiquen ni la
sequía ni la excesiva humedad. Pero, si algún mortal nos ofende,
piense en los muchos males que le reserva nuestra venganza. No
recogerá de su campo vino ni fruto alguno; cuando principien a
brotar sus vides y sus olivos, los devastaremos y los destruiremos
por medio del huracán; si le vemos fabricar ladrillos, lloveremos y
romperemos con redondo granizo las tejas de su casa; cuando él o
alguno de sus parientes o amigos contraiga matrimonio, lloveremos
a torrentes toda la noche97, de modo que preferirá haber estado en
Egipto a haber juzgado injustamente.
(Estrepsíades sale de su casa con un saco de harina y se dirige a la
de Sócrates).
ESTREPSÍADES
Aun faltan cinco días; después cuatro, tres, dos, y por último viene
luego a toda prisa el que más temo, detesto y abomino, el día treinta
del mes98 . Todos mis acreedores hacen el depósito necesario para
entablar un pleito y juran arruinarme y perderme: sin embargo, mis
proposiciones son moderadas y justas. "Amigo mío, digo a cada
uno, no me exijas por ahora esta cantidad; dame prórroga para
pagarte esta otra; perdóname aquélla". Pero ellos dicen que así no
cobrarán nunca, me insultan llamándome injusto, y dicen que van a
procesarme. ¡Qué me procesen! poco me importa, si Fidípides
aprende el arte de hablar bien. Pronto lo sabré; llamemos a la puerta
de la escuela. ¡Esclavo! ¡hola, esclavo!
SÓCRATES
Salud a Estrepsíades.
ESTREPSÍADES
Salud a Sócrates. Por lo pronto, toma esto99 Es justo regalar alguna
cosa al maestro. Di: ¿ha aprendido mi hijo el famoso razonamiento?

____________________________________________________________________
97 Para apagar las antorchas a cuya luz era conducida la novia a casa de su marido.
98 Literalmente el viejo y el nuevo, porque Solón le consideró común al mes que terminaba y al que daba principio (PLUTARCO, Vida de Solón,c. 25). En este día se pagaban los intereses.
99 La harina que le prometió antes.
________________________________

SÓCRATES
Lo ha aprendido.
ESTREPSÍADES
¡Bien, oh Fraude omnipotente!
SÓCRATES
Podrás ganar todos los pleitos que quieras.
ESTREPSÍADES
¿Aunque haya habido algún testigo cuando yo tomé el préstamo?
SÓCRATES
Aunque haya habido mil.
ESTREPSÍADES
De modo que podré gritar en alta voz: ¡Ay de vosotros, usureros!
ahora pereceréis con vuestro capital y los intereses de los intereses;
no me vejaréis más, porque en esa escuela se educa un niño mío,
armado de una lengua de dos filos, que será mi defensor, el salvador
de mi casa, el azote de mis enemigos, el que libertará a su padre de
infinitos cuidados y molestias. Llámale pronto afuera. ¡Hijo mío,
hijo mío! ¡Sal de la casa! ¡Atiende a tu padre!
SÓCRATES
Aquí Viene.
ESTREPSÍADES
¡Oh, amigo mío! ¡amigo mío!
SÓCRATES
Parte, y llévatelo.
(Sócrates entra en su casa)
ESTREPSÍADES
¡Oh, hijo mío! ¡Ah! ¡Ah! ¡Cuánto me alegro al ver tu color! Tu
rostro indica que estás dispuesto primero a negar, despu és a
contradecir, y que te es muy familiar esta frase: "¿Qué dices tú?" y
el fingirte injuriado, cuando injurias y maltratas a los demás. Hasta
en tu semblante brilla la mirada ática. Ahora date maña a salvarme,
ya que me has perdido.
FIDÍPIDES
¿Qué te atemoriza?
ESTREPSÍADES
El día viejo y nuevo.
FIDÍPIDES
¿Hay acaso algún día viejo y nuevo?
ESTREPSÍADES
En él dicen que van a hacer sus depósitos para procesarme.
FIDÍPIDES
Pues perderán los depositantes; porque un día no puede ser dos días.
ESTREPSÍADES
¿Que no puede ser?
FIDÍPIDES
¿Cómo? a menos que la misma mujer pueda ser a un tiempo vieja y
joven.
ESTREPSÍADES
La ley así lo dispone.
FIDÍPIDES
Indudablemente no comprenden bien el espíritu de la ley.
ESTREPSÍADES
¿Cuál es su espíritu?
FIDÍPIDES
El viejo Solón era, por carácter, amigo del pueblo.
ESTREPSÍADES
Eso no tiene nada que ver con el día nuevo y viejo.
FIDÍPIDES
Y fijó dos días para la citación a juicio, el viejo y el nuevo, a fin de
que los depósitos fuesen hechos el día del novilunio.
ESTREPSÍADES
¿Y por qué añadió el viejo?
FIDÍPIDES
¿Preguntas por qué, fatuo? Con objeto de que los que hayan sido
citados tengan un día para arreglar amigablemente el asunto; y de lo
contrario, para que pueda reclamárseles en la mañana misma del
novilunio.
ESTREPSÍADES
Entonces ¿por qué los magistrados no reciben los depósitos el día
primero del mes, sino en el anterior, en el día nuevo y viejo?
FIDÍPIDES
Me parece a mí que hacen lo que los glotones, adelantan un día para
disfrutar más pronto de los depósitos de los litigantes.
ESTREPSÍADES
¡Bien! Pobres tontos que servís de juguete a nosotros los sabios,
porque sois como piedras, como un rebaño de imbéciles, como
borregos aglomerados al acaso cual si fuerais tinajas. Preciso es que
yo entone un himno de alabanza en honor mío y de mi hijo.
"¡Feliz Estrepsíades, cuán sabio eres, y qué hijo has educado!" Tales
serán las palabras de mis amigos y conciudadanos cuando me
feliciten por haber ganado mis pleitos con tu elocuencia. Pero entra,
que antes quiero darte una buena comida.
(Entra en la casa)

PASIAS (dirigiéndose al testigo que viene con él).¿Conviene perder alguna vez los bienes propios en provecho de los demás? Nunca seguramente. Yo debí hace tiempo deponer toda vergüenza y me hubiera ahorrado estos disgustos. Ahora, para recobrar mi dinero, tengo que traerte como testigo, y convertir en enemigo un conciudadano. Pero suceda lo que suceda, jamás,mientras viva, me he de mostrar indigno de mi patria100 . Citaré a Estrepsíades...
(Sale Estrepsíades)

ESTREPSÍADES
¿Quién es este?
PASIAS
Para el día viejo y el día nuevo.
ESTREPSÍADES
Sed testigos de que ha indicado dos días a la vez. ¿Por qué me
citas?.
PASIAS
Por las doce minas que te presté cuando compraste el caballo tordo.
ESTREPSÍADES
¿Un caballo? ¿No le oís todos vosotros que sabéis cuánto aborrezco
la equitación?
PASIAS
Y juraste por los dioses que me las habías de restituir.
_________________________________________
100 Alude a la afición a pleitear de los atenienses.
_________________________________________
ESTREPSÍADES
¡Por Zeus! entonces mi hijo Fidípides aún no había aprendido el
razonamiento irresistible.
PASIAS
¿Y piensas por eso negar ahora tu deuda?
ESTREPSÍADES
¿Qué otro provecho he de sacar de aquella enseñanza?
PASIAS
¿Y te atreverás a negarla ante los dioses cuando yo te exija el
juramento?
ESTREPSÍADES
¿Qué dioses?
PASIAS
Zeus, Hermes, Posidón...
ESTREPSÍADES
Sin duda; y aún añadiré tres óbolos por el gusto de que me hagas
prestar juramento.
PASIAS
¡Ojalá castiguen tu desvergüenza!
ESTREPSÍADES
Si a este hombre le restregasen con sal estaría mejor101 .
PASIAS
¡Ah, te burlas!
_________________________________
101 Para hacer de él un pellejo de vino.
___________________

ESTREPSÍADES
Caben en él seis congios102 .
PASIAS
¡Por el gran Zeus y por todos los dioses! no te burlarás de mí
impunemente
ESTREPSÍADES
Me estás dando risa con tus dioses. Zeus, por quien juras, excita la
hilaridad de las personas ilustradas.
PASIAS
Algún día serán castigadas tus blasfemias. Pero contesta si me
pagarás o no; despáchame pronto.
ESTREPSÍADES
Ten paciencia. En seguida te voy a contestar claramente.
(Entra en su casa).
PASIAS
¿Qué te parece que hará?
EL TESTIGO
Me parece que te restituirá lo que le prestaste.
ESTREPSÍADES
¿Dónde está el que reclama el dinero? Di, ¿qué es esto?
PASIAS
¿Qué es eso? Una pequeña troj 103 .

______________________________________________________________________________
102 El congio xov era una medida de capacidad que contenía doce cótilas. La cótila equivalía a 27 centilitros.
103 Lit: una artesa.
______________________


ESTREPSÍADES
¿Y te atreves a reclamar tu dinero siendo tan rudo? No; jamás
devolveré ni un óbolo a quien llana troj a la troja.
PASIAS
¿Conque no me pagarás?
ESTREPSÍADES
No, que yo sepa. ¿Pero te marchas, o piensas echar raíces en la
puerta?
PASIAS
Me voy. Pero ten presente que, o me muero, o hago el depósito legal
para demandarte.
ESTREPSÍADES
Será una nueva pérdida que tendrás que añadir a la de las doce
minas. De todas maneras, siento que te suceda eso por haber
llamado neciamente troj a la troja.
AMINIAS
¡Ay, pobre de mí!
ESTREPSÍADES
¡Hola! ¿Quién es este que se queja? ¿Acaso ha hablado alguno de
los dioses de Carcino?104

AMINIAS
¿Quién soy? ¿Quieres saber quién soy? Soy un hombre desgraciado.
ESTREPSÍADES
Sigue entonces tu camino.
AMINIAS
¡Oh triste suerte mía! ¡Oh fortuna, que has roto las ruedas de mis
carros! ¡Oh Palas, tú me has perdido! 105
________________________________________________________________
104 Poeta que en alguna de sus tragedias introdujo dioses que se lamentaban.
______________________
ESTREPSÍADES
¿Pues qué daño te ha causado Tlepólemo?
AMINIAS
No te burles de mí, amigo mío; manda más bien a tu lujo que
devuelva el dinero que me debe, hoy principalmente que estoy en la
desgracia.
ESTREPSÍADES
¿De qué dinero hablas?
AMINIAS
Del que le presté.
ESTREPSÍADES
Tú no estás bueno, a lo que parece.
AMINIAS
Es verdad, me he caído al hacer galopar los caballos.
ESTREPSÍADES
Pues no se conoce, porque deliras como si nunca te hubieras caído
del asno106 .

AMINIAS
¡Conque deliro porque quiero cobrar lo que se me debe!
ESTREPSÍADES
Es imposible que estés en tu sano juicio.
______________________________
105 Parodia de una tragedia de Jenocles, hijo de Carcino, en la que Alcmena lamenta en iguales términos la muerte de su hermano Licimnio a manos de Tlepólemo.
106 La frase griega significaba al mismo tiempo caer en demencia, porque en la pronunciación se confundía, a :' o vov y a :o qov. Hemos tratado de sustituirla con una frase española equivalente.
_________________________

AMINIAS
¿Por qué?
ESTREPSÍADES
Me parece que tienes el cerebro algo perturbado.
AMINIAS
Por Hermes, te citaré a juicio, si no me devuelves el dinero.
ESTREPSÍADES
Dime: cuando llueve ¿crees tú que Zeus hace siempre caer agua
nueva, o bien que es el agua suspendida en el aire por el calor del
sol?
AMINIAS
No lo sé, ni me importa saberlo.
ESTREPSÍADES
Entonces ¿cómo ha de ser justo el pagarte si no tienes ninguna
noción de meteorología?
AMINIAS
Si te encuentras apurado, págame al menos el interés.
ESTREPSÍADES
¿El interés? ¿Qué animal es ése?
AMINIAS
Es el dinero que va creciendo más y más cada día, a medida que
transcurre el tiempo.
ESTREPSÍADES
Muy bien dicho. Pero contesta: ¿crees tú que el mar es ahora más
grande que antes?
AMINIAS
No, por Zeus, siempre es igual: porque el mar no puede aumentarse.
ESTREPSÍADES
¿Y cómo, gran canalla, si el mar no crece a pesar de los ríos que en
él desembocan, pretendes tú aumentar incesantemente tu dinero? A
ver si te largas pronto de esta casa. ¡Pronto! Un palo107 .
AMINIAS
Sed testigos de esto.
ESTREPSÍADES
¡Largo de aquí! ¿qué esperas? ¿No te moverás?
AMINIAS
¿No es esto una injuria?
ESTREPSÍADES
¿Te mueves, o me obligas a que te pinche como a un caballo de tiro?
¿Huirás? (Sale) Ya iba yo a removerte con tus ruedas y tus carros.
(Estrepsíades entra en la casa).
CORO
¡Lo que es aficionarse a las malas obras! Este viejo, que las ama con
pasión, quiere defraudar a sus acreedores el dinero que le prestaron;
pero es imposible que hoy no le sobrevenga alguna desgracia, y que
este sofista, en castigo de sus tramas, no sea víctima de algún mal
imprevisto. Creo que muy pronto conseguirá lo que deseaba, y su
hijo sabrá oponer hábiles argumentos contra la justicia, y vencerá a
todos sus adversarios aun cuando defienda las peores causas. Pero
quizá llegue a desear que su hijo sea mudo.
ESTREPSÍADES (saliendo precipitadamente)
¡Ay! ¡Ay! Vecinos, parientes, ciudadanos, socorredme con todas
vuestras fuerzas! ¡Me apalean! ¡Ay mis mandíbulas! ¡Infa me! ¿no
ves que es a tu padre a quien maltratas?

__________________________
107 Literalmente "un aguijón".
_____________
FIDÍPIDES
Lo confieso, padre mío.
ESTREPSÍADES
¿Oís? confiesa que me maltrata.
FIDÍPIDES
Sin duda.
ESTREPSÍADES
¡Perverso! ¡parricida! ¡horadador de murallas!
FIDÍPIDES
Dime otra vez esas injurias, y añade otras. ¿Sabes que tengo el
mayor gusto en escucharlas?
ESTREPSÍADES
¡Infame!
FIDÍPIDES
Me estás cubriendo de rosas.
ESTREPSÍADES
Maltratas a tu padre.
FIDÍPIDES
Y, por Zeus, he de demostrar que tengo razón en pegarte.
ESTREPSÍADES
¡Perversísimo! ¿Acaso puede nunca haber razón para pegar a su
padre?
FIDÍPIDES
Yo te lo demostraré y te convenceré con mis palabras.
ESTREPSÍADES
¿Que me convencerás?
FIDÍPIDES
Hasta la evidencia y muy fácilmente. Elige cuál de los dos
razonamientos he de emplear.
ESTREPSÍADES
¿Cuáles razonamientos?
FIDÍPIDES
El fuerte o el débil.
ESTREPSÍADES
A la verdad, querido mío, daré por bien empleados mis afanes para
enseñarte a contradecir la justicia, si consigues persuadirme que es
bueno y justo que los hijos golpeen a sus padres.
FIDÍPIDES
Pues creo que te persuadiré de tal manera, que en cuanto me hayas
oído no tendrás nada que replicarme.
ESTREPSÍADES
Tengo ganas de oírte.
CORO
A ti te corresponde, anciano, el encontrar un medio de reducirle a la
obediencia; porque no estaría tan soberbio si dudase de su triunfo.
Por tanto, hay alguna cosa que le hace insolente como hombre
confiado en sus propias fuerzas. Pero primeramente conviene que
digas al Coro cómo ha tenido lugar vuestra disputa. Esto es lo que
debes hacer antes de todo.
ESTREPSÍADES
Os diré cómo comenzó nuestra reyerta. Después que hubimos
comido, como sabéis, le mandé en primer lugar tomar su lira y
cantar la canción de Simónides "Cuando el Carnero fue
trasquilado". Y en seguida me replicó que era una necedad cantar de
sobremesa acompañándose con la cítara, como una mujer ocupada
en moler trigo.
FIDÍPIDES
¿Y no era motivo para golpearte y patearte el que me hubieses
mandado cantar como si tuvieras cigarras convidadas?
ESTREPSÍADES
Ahora no hace más que repetir lo que me dijo en casa: también
aseguré que Simónides era un mal poeta. Me contuve al principio,
aunque con trabajo, y le mandé que, tomando la rama de mirto, me
recitase algún trozo de Esquilo. "¡Está muy bien! -me contestó-
Precisamente yo considero a Esquilo el primero de nuestros poetas,
como que es desordenado, enfático, estrepitoso y desigual". Con
estas palabras, considerad como estaría mi corazón; pero
reprimiendo la ira le dije: "Ea, recita. si no, algunos pasajes de los
poetas modernos que son los más doctos". Y en seguida cantó un
fragmento de Eurípides, en que un hermano ¡justo cielo! viola a su
hermana de madre108 Entonces yo no pude contenerme y le dirigí los
más terribles insultos, y después, como suele suceder, acumulamos
injurias sobre injurias; y por último, éste se lanza sobre mí, me
golpea, me maltrata, me sofoca y me mata.
FIDÍPIDES
Muy justamente. ¿Por qué no elogias al doctísimo Eurípides?
ESTREPSÍADES
¡El doctsimo! ¡Ah!... ¿Cómo diré yo? Pero seré de nuevo
maltratado.
FIDÍPIDES
Sí, por Zeus, y justamente.
__________________________________________________________________________
108 Una ley de Solón permitía el matrimonio con los hermanos de padre, pero entre hermanos uterinos estaba prohibido. Estrepsíades alude a una tragedia de Eurípides, Eolo, en que Macareo viola a su hermana Cánace.
___________________________________
ESTREPSÍADES ¡Justísimamente, desvergonzado! ¡A mí que te he educado con tanto cariño, que adivinaba los deseos que manifestabas con voz todavía balbuceante! Si decías "brin", te comprendía, y te daba al punto de beber. Si decías "man-man", en seguida te traía pan. Apenas habías dicho "cacean" te sacaba fuera y te sostenía para que hicieras tus necesidades109 . Ahora, aunque yo clame y grite, es bien seguro,bribón, que no me sacarás fuera ni me sostendrás. Al contrario, me sofocas y me obligas a desahogarme aquí mismo.
CORO Creo que el corazón de los jóvenes palpita impaciente por escuchar lo que va a decir. Y si logra demostrar que obró justamente al perpetrar tal crimen, no doy un comino110 por la piel de los viejos. Ahora, gran inventor y removedor de palabras, busca argumentos convenientes para justificar tu causa.
FIDÍPIDES ¡Qué grato es vivir entre cosas nuevas e ingeniosas y poder despreciar las leyes establecidas! Cuando me ocupaba sólo de la equitación, no podía pronunciar tres palabras seguidas sin equivocarme; pero desde que este hombre me ha hecho abandonar mis aficiones predilectas, y me be acostumbrado a los pensamientos sutiles, a los discursos y a las meditaciones, me siento capaz de probar que he obrado bien maltratando a mi padre.
ESTREPSÍADES Sigue con la equitación, por Zeus. Prefiero mantener cuatro caballos a ser molido a golpes.
FIDÍPIDES Reanudo mi discurso en donde tú lo has interrumpido, y principio por preguntarte: ¿Me pegaste cuando era chico?
-----------------------------------------
109 Parodia del admirable discurso de Fénix en la Iliada. Lib. IX.
110 Lit.: un garbanzo.
__________________-
ESTREPSÍADES
Sí, porque te quería y miraba por tu bien.
FIDÍPIDES
Dime: ¿no será justo que ahora mire yo igualmente por tu bien, y te
pegue, puesto que el pegar a uno es mirar por su bien? ¿Es
razonable que tu cuerpo este exento de palos y el mío no? ¿No nací
yo de tan libre condición como tú? Lloran los hijos, ¿y no han de
llorar los padres? ¿Crees que los padres no deben llorar?
ESTREPSÍADES
¿Por qué?
FIDÍPIDES
Tú dirás que la ley tolera que el niño sea castigado, y yo replicaré
que los viejos son dos veces niños, y que es más justo castigar a los
viejos que a los jóvenes, por cuanto sus faltas son menos
excusables.
ESTREPSÍADES
Pero ninguna ley establece que el padre sea castigado.
FIDÍPIDES
¿No era hombre como tú y como yo el que primeramente presentó
aquella ley y persuadió a los antiguos a que la aprobasen? Pues bien:
¿qué se opone a que yo haga una nueva por la cual los hijos puedan
a su vez castigar a los padres? De buen grado os perdonamos los
golpes recibidos antes de la promulgación de esta ley, y
consentimos el haber sido maltratados impunemente. Mira cómo los
gallos y los demás animales se vuelven contra sus padres: sin
embargo ¿se diferencian de nosotros en otra cosa que en no redactar
decretos?
ESTREPSÍADES
Ya que imitas a los gallos en todo ¿por qué no comes estiércol y
duermes en un palo?
FIDÍPIDES
No es lo mismo, querido; Sócrates no admitiría ese argumento.
ESTREPSÍADES
No me pegues, pues te perjudicarás tú mismo.
FIDÍPIDES
¿Por qué?
ESTREPSÍADES
Porque lo justo es que yo te castigue; y que tú castigues a tu hijo, si
alguno te nace.
FIDÍPIDES
¿Y si no me nace? Habré llorado en vano, y tú morirás burlándote
de mí.
ESTREPSÍADES
En verdad, amigos míos, voy creyendo que tiene razón, y que se les
debe conceder lo que es equitativo. Justo es que seamos castigados
si no andamos derechos.
FIDÍPIDES
Escucha otro argumento todavía.
ESTREPSÍADES
Soy hombre muerto.
FIDÍPIDES
Quizá te alegres de haber sido maltratado.
ESTREPSÍADES
¿Cómo? Dime qué ganancias sacaré.
FIDÍPIDES
Maltrataré también a mi madre.
ESTREPSÍADES
¿Qué dices? ¿Qué dices? ¡Eso es mucho peor!
FIDÍPIDES
¿Qué dirás, si te pruebo por medio de aquel razonamiento que es
necesario maltratar a la madre?
ESTREPSÍADES
Si haces eso, nada se opondrá a que te arrojes al Báratro111 con
Sócrates y su maldito razonamiento. Por vosotras, Nubes, me sucede
esto; por vosotras a quienes encomendé todos mis asuntos.
CORO
Tú tienes la culpa de todo por haber seguido la senda del mal.
ESTREPSÍADES
¿Por qué no me lo advertisteis antes, en vez de engañar a un pobre
viejo campesino?
CORO
Siempre obramos de esa manera cuando conocemos que alguno se
inclina al mal, hasta enviarle una desgracia, para que aprenda a
respetar a los dioses.
ESTREPSÍADES
¡Ay! doloroso es el castigo ¡oh Nubes! pero justo. Pues no deb ía
haber negado a mis acreedores el dinero que me prestaron. Ahora,
hijo mío querido, acompáñame para que nos venguemos del infame
Querefón y de Sócrates, que nos han engañado.
FIDÍPIDES
Nunca maltrataré a mis maestros.
ESTREPSÍADES
Respeta a Zeus paternal.

_____________________________
111 Precipicio al que eran arrojados los criminales.
______________
FIDÍPIDES
¡Zeus paternal! ¡qué tonto eres! ¿Hay acaso algún Zeus?
ESTREPSÍADES
Sí.
FIDÍPIDES
No hay tal; pues reina el Torbellino que ha destronado a Zeus.
ESTREPSÍADES
No lo ha destronado; pero entonces creía que ese Torbellino era
Zeus. ¡Pobre de mí, que tomé por un dios a un vaso de arcilla! 112

FIDÍPIDES
Quédate ahí diciendo necedades.
(Se va)
ESTREPSÍADES
¡Funesto delirio! ¡Qué necio fui al negar los dioses? persuadido por
Sócrates! Pero, queridísimo Hermes, no te encolerices conmigo: no
me aniquiles; perdona a un pobre hombre fascinado por la
charlatanería de los sofistas; sé mi consejero: ¿qué te parece?
¿entablaré contra ellos un proceso o adoptaré otra resolución?...
¡Excelente consejo!113 dices que no espere la tardía determinación
de una sentencia e incendie cuanto antes la casa de los habladores.
¡Hola, Jantias! ven acá, trae una escalera y un azadón, sube en
seguida al tejado de la escuela; y si amas a tu dueño, sacude de
firme hasta que el techo se desplome sobre los habitantes. Dad me
también una antorcha encendida; quiero vengarme de esos infames a
pesar de toda su arrogancia.

_______________________
112 Estrepsíades parece dirigirse a un vaso de arcilla que, según Brunck, debía haber en el teatro, delante de la casa de Sócrates, sustituyendo a la columna en honor de Apoloque los Atenienses acostumbraban a colocar en el vestíbulo.
113 Se supone inspirado por Hermes.
___________________

DISCÍPULO PRIMERO
¡Ay! ¡Ay!
ESTREPSÍADES
Antorcha mía, lanza una llama devoradora.
DISCÍPULO PRIMERO
¡Eh! tú: ¿qué estás haciendo?
ESTREPSÍADES
¿Qué hago? Disputo sobre sutilezas con las vigas de la casa.
DISCÍPULO SEGUNDO
¡Ah! ¿Quién incendia nuestra casa?
ESTREPSÍADES
Aquel a quien habéis cogido la capa.
DISCÍPULO SEGUNDO
¡Que nos vas a matar! ¡Que nos vas a matar!
ESTREPSÍADES
No quiero otra cosa, con tal que el azadón no defraude mis
esperanzas o que antes no me desnuque cayéndome de lo alto.
SÓCRATES
¡Hola! ¿qué haces en el tejado?
ESTREPSÍADES
Camino por el aire y contemplo el sol.
SÓCRATES
¡Ay de mi! intentas asfixiarme.
QUEREFON114
¡Desgraciado! voy a morir quemado vivo.
ESTREPSÍADES
¿Quién os mandaba ultrajar a los dioses, y contemplar el lugar de la
luna? Sigue115, arranca, destroza, paguen así todas sus culpas, y
principalmente su impiedad.
CORO
Retirémonos; pues el Coro ha trabajado bastante.


_______________
114 Bergk (Aristophanis Comoedias. Lipsiae, 1867, volumen 1, pág. XVII) dice que las palabras de Querefón deben atribuirse al Discípulo, pues si el poeta hubiera querido que interviniera en la acción, indudablemente hubiera dado también más importancia a su papel. Cree asimismo que los Discípulos de Sócrates debe entenderse que son uno solo.
115 Estas palabras van dirigidas a Jantias.
___________