Pastorela Godínez: La Misión Navideña
(Una Comedia Corporativa)
de B. Gavarre
Personajes:
Mefistófeles (Mefis): Un headhunter con traje de Armani y portafolio de piel barata.
Diabla de RRHH (Lilith): La asistente de Mefis. Siempre con libreta y pluma para “evaluar”.
Gabriel (El Coach): Un consultor motivacional con un blazer ajustado.
Maru: La Godínez chismosa y vanidosa.
Chucho: El Godínez tragón y perezoso.
Luis: El Godínez cínico y apático.
ESCENA I
(La oficina. Un espacio de cubículos con luces fluorescentes. Las decoraciones navideñas son pintorescas. Un nacimiento improvisado está hecho con cajas de tóner y en el centro hay un Niño Dios de plástico con un gafete que dice "Becario Estrella". Además, hay elementos decorativos exagerados como piñatas fiusha colgando de los plafones y guirnaldas de papel picado que cuelgan con dificultad. Los empleados están en sus puestos, bostezando, entre este curioso espectáculo.)
(Entra Mefis con su tablet, gesticulando con frustración. Detrás, Lilith, la Diabla de RRHH, camina con dificultad, cargando dos cajas de cartón.)
MEFIS: (Mirando su tablet con furia.) ¡Ay, dioses del Olimpo godínez, la tragedia ha comenzado! ¡El día del juicio ha llegado! ¡La noche en que Él viene a arruinar mi cuota trimestral! ¡Soy Mefis, el headhunter supremo, pero hoy estoy que me lleva el sistema! ¡Diablos, demonios, a trabajar todos! ¡Haraganes, holgazanes! ¡Bola de sin-proactividad!
LILITH: (Dejando caer una caja con estruendo.) Doscientos cincuenta, trescientos... ¡Jefe, no me va a alcanzar para la cuota de la tanda! ¡Y ya me cortaron el internet por falta de pago!
MEFIS: (Ignorándola.) ¡Te estoy hablando, Lilith! ¿Dónde se metieron esos "recursos valiosos"? ¡Tenemos la base de datos saturada y ni un alma nueva para colocar! ¿Cómo pretenden que superemos la "curva de rendimiento"?
LILITH: ¿Almas? ¿Para qué? ¿Para la bienvenida de nuevo ingreso o para la fiesta de fin de año? Porque ya nadie quiere venir a trabajar en su "cultura de alto rendimiento". Yo por más que me pongo la camiseta...
MEFIS: ¡Cállate! ¡Aquí no hay "bono", ni "vacaciones", ni "clima laboral" amigable! ¡Aquí se trabaja gratis y hasta ponen de su tupper! ¡Este es el infierno de las oficinas!
LILITH: ¿Y cómo diablos voy a conseguir mis likes de playa si no me voy?
MEFIS: ¡Por Belcebú! Tengo el peor equipo de reclutamiento. Pero en fin, o nos damos prisa, o "los de arriba" se llevan a todos los "talentos". ¡Tenemos que preparar la "oferta irresistible"!
LILITH: Ay, jefe, ¿yo? No, yo no. Mire, hasta conseguí una concesión para vender tuppers en la feria de la colonia, para ir cuando menos a Chimalhuacán.
MEFIS: ¡Con un demon..! ¡Basta, o te mando a "capacitación intensiva"! Tengo que llevar al infierno de los godínez al "primer mundo". ¡Donde hay software pirata y donde el influyentismo beneficia al más astuto!
LILITH: ¡Sí, un infierno con "clima laboral" controlado!
MEFIS: ¡Con la tecnología más avanzada en "milagros corporativos"! ¡Y nadie dice nada si le reventamos el alma a los empleados! Pero dejemos de "soñar en grande". ¡Conseguiremos con un solo acto superar el estado catatónico de la generación pandemia!
LILITH: Oiga jefe, ¿no se le hacen muchas "pretensiones estratégicas"? Vamos a enfrentarnos con una "potencia" muy "poderosa y potente".
MEFIS: ¡Por Leviatán! Debiste asesorar a los últimos presidentes. ¡Hoy, que el "amor al prójimo" desafía nuestro "egoísmo corporativo", desplegaré el "poder del abuso y la impunidad"! ¡Ensancharé las "fronteras de la maldad"! ¡Apagaré la "luz divina" que alimenta las "esperanzas de los mortales"! ¡¡¡COMPRARÉ LA ELECCIÓN DE "EMPLEADO DEL AÑO"!!! ¡Ja, ja, ja, ja..!
(Mefis y Lilith salen.)
ESCENA II
(La oficina. Los tres Godínez están sentados en sus cubículos, fastidiados. Chucho come. Maru se retoca el maquillaje. Luis teclea con monotonía.)
MARU: (A su reflejo.) ¡Por la Virgen del Home Office! ¿Cómo que el reporte no se envió solo?
CHUCHU: (Con la boca llena de galletas.) ¡Ay, Maru! ¡Ya vamos a pararle un rato! ¡Que no he dejado de teclear desde que me tomé el café de la mañana!
LUIS: (Sin levantar la vista.) Quéjate menos y busca el email de la señora que te vendió el tupper con tamales. A lo mejor te da una oferta.
MARU: ¿Cómo pueden hablar así hoy? ¡Hoy, que la diabla de recursos humanos nos puede cortar las patas! Y más ahora con los chismes que andan corriendo por los pasillos...
CHUCHU: ¿Qué chismes? ¿Ya se acabó el café del pasillo tres?
MARU: ¡Ay, no! ¿Qué te importa el café? Hablo del bono de fin de año. Dicen que solo se lo van a dar a los gerentes. Y que el bono gordo es para la que subió de puesto por sus encantos... ¡y yo con tantos encantos y ni las gracias me han dado!
LUIS: (Con sarcasmo.) No sé por qué te sorprende. Esta empresa es como un tianguis: el que más grita, el que más se embarra de salsas, se lleva lo mejor.
CHUCHU: Pues yo por eso me pongo la camiseta... ¡para no manchar mi sudadera con las sobras de los de arriba!
MARU: ¡Y no solo eso! Dicen que a Memo, el de Proyectos, lo van a mandar a una especialización a España... ¡a España! ¿Y por qué a él? Si yo me la he pasado estudiando webinars de coaching ontológico y Memo solo toma fotos de su comida para Instagram. ¡Yo me merezco más ese viaje!
LUIS: Pero no te enojes, el chiste es que a ti te manden a una especialización en el DF... ¡a Tlalpan!
MARU: ¡Se nota que no tienes "visión" de negocio! ¡Pero espérense, porque viene un nuevo chisme! El nuevo gerente de área, el que nos van a presentar, ni siquiera es mexicano. ¡Es español! Y de Barcelona, para acabarla... ¡ni siquiera de Madrid! ¡Ya ven cómo es esto, solo lo hicieron gerente por ser extranjero, por más que tenga cara de pasante de la UNAM!
CHUCHU: ¿Otra vez? ¿Como el anterior que quería cambiarse de edificio porque la actual zona era de "puros mexicanos piojosos"? ¡Con esos sí no me pongo la camiseta! ¡Viva México, cabb..!
(Las luces parpadean y una luz brillante se enciende afuera de la ventana. Se escucha una voz en off con música de intro de webinar motivacional.)
LUIS: (Se quita los audífonos, perplejo.) ¿Y, ahora? ¿Qué es eso? ¡Una estrella!
MARU: (Se hinca teatralmente.) ¡Perdónanos, CEO de la Empresa! ¡No nos despidas!
(Los tres Godínez intentan esconderse debajo de sus escritorios. Entra Gabriel (El Coach), vestido con su blazer brillante y una sonrisa permanente.)
GABRIEL: (Con voz de influencer.) ¡Atención, equipo! No temáis. He venido a traeros un mensaje importante. No tengáis miedo, porque soy el portador de noticias falaces... ¡digo, felices!
LUIS: (Con la cabeza asomando.) ¿Y, ahora quién es este? ¿El de seguros de vida?
MARU: ¿Cómo quién? ¡Es el mismísimo Coach de Vida!
GABRIEL: Escuchad el mensaje que os traigo, porque hoy es vuestra oportunidad de obtener el "perdón divino" y la "gracia del Señor".
CHUCHU: ¿Y va a regalar tuppers?
GABRIEL: Escuchad, vengo a anunciaros el "portento" que esta noche vendrá. Acaecerá "al oriente", donde brilla la "estrella" (señalando la luz parpadeante). Seguidla, seguidla.
CHUCHU: (Mirando la luz.) ¡Con una... Yo digo que es un cometa! ¡O un dron de Amazon Prime!
LUIS: ¡Qué cometa ni qué nada! ¡Esa es la Estrella de la Muerte! ¡Se va a estrellar en el edificio y nos va a dar el día libre por catástrofe laboral!
MARU: ¡Ya cállense! ¡Ya la vi y parece la de los comerciales!
GABRIEL: (Con su sonrisa congelada.) No importa si la ven o no. Lo que importa es que la fe los lleve a "iluminar sus existencias".
(En ese momento, un empleado de mantenimiento (sin diálogo) entra arrastrando los pies. Trae una estrella de plástico fiusha, de las que se usan en las piñatas, pegada con cinta adhesiva en la punta de un palo de escoba.)
MARU: ¡Cállense, ahí viene! ¡Ahí viene la estrella!
EMPLEADO DE MANTENIMIENTO: (La coloca de mala gana sobre el pesebre del "Becario Estrella" y se va.)
LUIS: (Mirando el adorno en el pesebre, con la voz apagada.) Ah... así que esa era la pinche estrella...
(Se corrige de inmediato.)
LUIS: ...más respeto, ehh.
(Los Godínez, salvo Luis, siguen al Coach con entusiasmo.)
ESCENA III
(La oficina ha sido transformada, pero ahora es un rincón de mercado improvisado. Hay mesas con todo tipo de artículos de dudosa procedencia: tuppers con comida, ropa de catálogos, y frascos de cremas milagrosas. En una esquina, una vendedora anónima (sin diálogo) ofrece sus productos en silencio. Entran los tres Godínez, discutiendo.)
CHUCHU: ¿Y ahora qué? ¿Tenemos que comprarle un regalo al Niño Dios de plástico del archivero?
LUIS: Pues sí, es la tradición, ¿no? Si no lo hacemos, el "Jefe de Jefes" nos va a dar un recorte de personal.
MARU: A mí me parece que deberíamos hacer un "intercambio de regalos" de esos que nadie se toma en serio. Pero que quede claro: ¡la cuota es de mil doscientos pesos!
CHUCHU: ¿¡Mil doscientos!? ¡Ay, no! La última vez a mí me tocó una pijama de ositos de peluche que se despintó en la primera lavada. Y yo le regalé una cafetera de cápsulas al de Contabilidad...
LUIS: (Con sarcasmo.) ...que te regaló una taza de la empresa. Ya me sé el final.
MARU: ¡Por eso! ¡Es que nunca es justo! Y ahora tenemos que comprarle algo al Niño Dios. Yo propongo que le compremos entre todos un solo regalo, pero uno que valga la pena.
CHUCHU: ¿Un regalo grande? ¿Como una televisión de pantalla plana para el área de descanso?
LUIS: (Con los ojos en blanco.) No, para el Niño Dios, tonto. Digo, para el Becario Estrella.
(De repente, aparecen Mefis y Lilith, observándolos desde la distancia. Mefis tiene un brillo de malicia en los ojos.)
MEFIS: (Susurrando a Lilith.) ¡Ajá! ¡Percibo la avaricia en sus "negociaciones"! ¡La envidia! ¡Son el "capital humano" perfecto!
LILITH: ¿Cuál es el plan, jefe? ¿Les vendemos algo de nuestro "stock de pecados"?
MEFIS: (Con una sonrisa de tiburón.) Mejor. Haremos un "intercambio de regalos" con ellos. Les daremos algo que crean que es valioso, mientras yo me quedo con sus "almas de Godínez".
(Mefis y Lilith se acercan a los Godínez. Mefis se pone en modo "vendedor de auto usado".)
MEFIS: ¡Oigan, oigan! ¡Amigos! Los veo en una "sesión de lluvia de ideas" muy prometedora. ¿Necesitan ayuda para decidir el regalo perfecto para el "Becario Estrella"?
MARU: ¿Y usted quién es? ¿El de Soporte Técnico?
MEFIS: (Seductor.) ¡Soy el especialista en "Regalos de Alto Impacto"! Y tengo la "oferta del día" perfecta para ustedes.
(Lilith saca un estuche pequeño y lo abre con un flourish. Adentro hay tres pequeños objetos brillantes: un audífono inalámbrico de imitación, una navaja suiza de plástico y una tarjeta de presentación de lujo.)
LILITH: ¡Tenemos el "kit de ascenso automático"! Un audífono para que finjas estar en una "junta importante", una navaja para que "recortes el presupuesto" sin piedad, y una tarjeta de presentación que te sube el estatus social.
MARU: (Con los ojos brillando.) ¿De verdad? ¿Y qué tenemos que dar a cambio?
MEFIS: (Con voz de tele-evangelista.) Solo tienen que "cederme" sus "esperanzas de bono de fin de año". Es un "pequeño precio" a pagar por la "gloria corporativa".
(Los Godínez dudan. Maru quiere el audífono, Chucho la navaja para su tupper, y Luis se ríe de todos ellos. De repente, las luces parpadean.)
CHUCHU: ¡Ay, no! ¡Ya van a empezar con sus trucos de magia!
(Entra Gabriel (El Coach), cubierto con una sábana de hospital que simula ser una "capa de invisibilidad".)
GABRIEL: (Sospechando, huele el aire.) ...Aquí me huele a... ¿Regalos de dudosa procedencia? Hay que "sacarle el mal"... ¡Con un reporte de "rendición de cuentas"!
MEFIS: (Con voz de ultratumba.) ¡No te metas, Gabriel! Estos "Godínez" son míos.
GABRIEL: ¡"Reclutador de pacotilla"! Tus "regalos" de mentiras no pueden contra la "fuerza del Señor".
(Mefis y Gabriel se confrontan verbalmente, mientras los Godínez discuten entre ellos sobre cuál regalo es mejor. El enfrentamiento se convierte en una ridícula batalla de argumentos de venta.)
ESCENA FINAL: El Gran Enfrentamiento Godínez y la Reconciliación Navideña
(La oficina se apaga por completo, sumiéndose en la oscuridad. Solo se ve la luz de las pantallas de las computadoras. Se escuchan los ruidos de teclados y el estómago de Chucho rugiendo.)
CHUCHU: (Entrando a tientas.) Ya no aguanto el hambre. No he comido nada desde hace...
LUIS: (Con linterna de su celular.) ¡Diez minutos! ¿No te tragaste quince muffins tú solito?
MARU: (A lo lejos.) ¿Dónde están? ¡Estoy más perdida que en el pasillo de contabilidad a fin de mes!
(De pronto, aparecen Mefis y Lilith, sus siluetas apenas visibles en la oscuridad. Sus voces suenan como susurros tentadores.)
MEFIS: (Seductor.) No tengan miedo, pequeños "recursos humanos". He venido a ofrecerles una última oportunidad. Únanse a mí, y les prometo un bono tan grande que podrán comprar una casa en la Roma. No una especialización en España, sino el viaje a España completo... ¡en primera clase!
LILITH: (Con voz chillona.) ¡Y yo les daré el pastel de chocolate más cremoso del mundo!
CHUCHU: (Olfateando.) ¡Pastel! ¡¿Dónde?!
(Por el otro lado, aparece la figura luminosa de Gabriel, su blazer brilla en la oscuridad.)
GABRIEL: (Con voz de gurú.) ¡Alto, criaturas de la codicia! No caigan en sus trampas. La verdadera felicidad no se mide en bonos. ¡Únanse a mí y les prometo paz interior! ¡La satisfacción de un trabajo bien hecho! ¡Un "clima laboral" sin toxicidad!
MEFIS: ¡Cállate, "coach"! Tus promesas son tan vacías como los discursos de los lunes. ¿Paz interior? ¡Mis clientes quieren "poder adquisitivo" y "estatus"!
LILITH: ¡Jefe, jefe! ¡Ahí está! ¡El becario! (Señala el nacimiento.)
(Mefis se acerca al nacimiento, susurrando al Becario Estrella de plástico.)
MEFIS: ¡Tú, pequeño "Becario Estrella", eres el más valioso de todos! ¡Te ofrezco el puesto de Gerente General! Solo tienes que firmar este "contrato indefinido" con una cláusula de confidencialidad y lealtad eterna.
GABRIEL: (Le grita a Mefis.) ¡Déjalo en paz! ¡El Becario no es un "recurso"! ¡Es la "promesa" de un futuro mejor!
(La confrontación se vuelve una ridícula pelea de poder entre los tres Godínez y las fuerzas del bien y del mal. Mefis y Lilith intentan convencerlos con ofertas materiales, mientras que Gabriel los acosa con discursos motivacionales.)
MEFIS: ¡Maru, ven con nosotros! Te daremos la "posición" que mereces. La especialización en España será tuya. El nuevo jefe de Barcelona no tendrá nada que decir. ¡Nadie tiene encantos como tú!
MARU: (Dudando.) ¿De verdad? ¿Un puesto de verdad?
GABRIEL: ¡No la escuches! ¡Maru, el verdadero encanto no viene en los "beneficios" de la empresa! ¡Viene de la "gratitud"!
LUIS: ¡Ya basta! ¡Con una chicharrón, cállense los dos! ¡Esto es peor que una junta de fin de año! Los dos prometen cosas que no pueden dar. Tú (a Mefis) nos vendes humo corporativo, y tú (a Gabriel) nos vendes felicidad, que es más o menos lo mismo.
CHUCHU: (Señala a ambos.) ¡Yo solo quiero mi torta de tamal! ¡Y el pastel! ¡Ya me voy!
(Chucho sale, frustrado. Maru se queda mirando a Mefis, y Luis a Gabriel.)
MEFIS: ¡Vamos, Maru! Elige tu destino. ¿Quieres ser la "Reina del E-commerce" o seguir siendo una "Godínez" de tercera?
GABRIEL: ¡Luis! ¡Tú tienes la "sabiduría" para elegir el bien! ¡Elige el "trabajo digno"!
(Maru se acerca a Mefis y Luis a Gabriel. De pronto, se miran a sí mismos y al Becario Estrella en el nacimiento.)
MARU: ¿Sabes qué? Por una vez... yo no quiero ni el bono ni el viaje. Me quedo.
LUIS: (Le sonríe.) Yo también. Mejor me quedo aquí que en el infierno de las oficinas.
(Maru y Luis caminan juntos, dejando a Mefis, Lilith y Gabriel en la oscuridad. El único que se queda es Chucho, que se ha regresado.)
CHUCHU: (A lo lejos.) ¿Y el pastel? ¿Nadie quiere pastel?
MEFIS: ¡¿Qué?! ¡¿No se los llevan?! ¡Mi bono! ¡No es justo! ¡Lilith, vámonos! ¡Tenemos una "reunión de evaluación" muy importante!
(Mefis y Lilith se lamentan y salen corriendo. Gabriel se queda solo, mirando al público.)
GABRIEL: (Con voz de gurú, intentando mantener la compostura.) ¿Ven? ¡El "espíritu navideño" es más fuerte que cualquier "beneficio corporativo"! ¡Ahora, solo nos queda encontrar a un nuevo "equipo" para la próxima "capacitación"! (Suspira.) Hmm... y hablando de espíritu... (Empieza a tararear, buscando la letra.) "Los pastores corren presurosos... tienen... de tanto correr... los..." ¡Ay, no me la sé! ¡Se me fue la letra!
(De repente, Mefis y Lilith reaparecen, asomándose tímidamente.)
MEFIS: (Completando la frase con tono burlón pero rítmico.) ¡"...los pies llenos de comezón"! ¡Jajajajaja!
LILITH: (Uniendo su voz.) ¡Los pastores corren presurosos, tienen de tanto correr los pies llenos de comezón!
GABRIEL: (Sorprendido, pero luego sonriendo.) ¡Esa es! ¡Vamos, canten conmigo!
(Mefis, Lilith y Gabriel empiezan a cantar el villancico. Maru, Luis y Chucho (que ha vuelto) se les unen con entusiasmo. Mientras cantan, del techo baja una piñata fiusha con forma de estrella.)
TODOS: (Cantando a coro.)
Los pastores a Belén
Corren presurosos
Llevan, de tanto correr
Los zapatos rotos
Ay, ay, ay, ¡qué alegres van!, ay, ay, ay si volverán
Con la pan-pan-pan, con la de-de-de
Con la pan-, con la de-, con la pandereta
Y las castañuelas...
Un pastor se tropezó
A media vereda
Y un borreguito gritó
"Ese ahí se queda"
Ay, ay, ay, ¡qué alegres van!, reiré si volverán
Con la pan-pan-pan, con la de-de-de
Con la pan-, con la de-, con la pandereta
Y las castañuelas...
Los pastores a Belén
Casi, casi vuelan
Y es que de tanto correr
No les quedan suelas
Ay, ay, ay, ¡qué alegres van!,
ay, ay, ay si volverán
Con la pan-pan-pan, con la de-de-de
Con la pan-, con la de-, con la pandereta
Y las castañuelas
Ay, ay, ay, ¡qué alegres van!, reiré si volverán
Con la pan-pan-pan, con la de-de-de
Con la pan-, con la de-, con la pandereta
Y las castañuelas
"Los pastores corren presurosos,
tienen de tanto correr los zapatos rotos...
Navidad, Navidad, hoy es Navidad,
es la fiesta del amor y la felicidad.
Navidad, Navidad, hoy es Navidad,
es la fiesta del amor y la felicidad."
(Después del villancico, todos se acomodan alrededor de la piñata. Uno de los actores le da un palo a Chucho.)
CHUCHU: (Con el palo en alto.) ¡Ahora sí! ¡Esto es lo mío!
TODOS: (Gritando con emoción.) ¡Dale, dale, dale! ¡No pierdas el tino! ¡Porque si lo pierdes, pierdes el camino! ¡Dale, dale, dale! ¡Dale sin temor! ¡Que en esta piñata hay mucho amor!
(Chucho golpea la piñata hasta romperla. Caen dulces, cacahuates y algunas tarjetas de "vales de despensa" de juguete. Los actores recogen los dulces y los reparten entre el público.)
FIN