Central Park Condo. La Anarquía Digital y el Felino Fantasma
De Ben Gavarré
Prefacio
Existen en el universo ciertas constantes que, por más que la razón intente explicarlas, persisten. La gravedad, la velocidad de la luz... y que, si una historia necesita un gato, la dueña se llamará Karen. No hay una explicación científica ni un algoritmo que lo demuestre, pero es una verdad tan inmutable como la entropía.
Para ser precisos, en esta historia, la dueña se llama Karen Santoyo. Sin embargo, no esperen ver a una mujer con un gato en brazos, ni a un felino persiguiendo un ovillo de lana. Este no es un cuento de hadas, sino una comedia de enredos con un toque de física cuántica y un apagón digital.
Prepárense para conocer a la familia Santoyo, una tribu moderna tan apegada a sus pantallas que casi han olvidado cómo vivir. Y a su nueva vecina, Karen, una "diseñadora de experiencias" que llega para reiniciar sus vidas. Pero, ¿dónde está el gato? Ah, el gato es lo de menos. Lo importante es que un gato, aun sin estar presente, puede desatar un caos tan real como los likes que no obtienes.
Y, como en todo buen experimento cuántico, la pregunta no es si el gato está vivo o muerto, sino si la familia Santoyo volverá a encontrar el camino a la vida real. Abran el telón y dejen que la función comience, porque en este departamento, el único que no está atrapado es el gato.
Personajes:
* Leo (20s): El hermano mayor, un influencer de videojuegos.
* Elías (15): El hermano menor, un genio de la informática.
* Leticia (50s): La madre, adicta a las redes sociales.
* Ricardo (50s): El padre, un burócrata obsesionado con el orden.
* Karen (30s): La nueva vecina, una diseñadora de experiencias... ¿con un gato?
Acto I
Escena 1: El Santuario Tecnológico
(La escena se abre en el departamento minimalista. La sala parece un santuario tecnológico. Pantallas gigantes en las paredes, luces LED que cambian de color, consolas y dispositivos por todos lados. Leticia está sentada en el sofá, pegada a su celular, grabando un video para su Instagram.)
Leticia: (Al teléfono) ¡Hola, mis followers! ¡Buenos días desde mi oasis de tranquilidad, en mi departamento chic de Central Park! Aquí con mi cafecito orgánico... ¡Ya saben que los amo!
(Entra Ricardo, trajeado. Camina por la sala esquivando los cables y se para frente a Leticia. Ella no lo ve. Ricardo intenta llamar su atención.)
Ricardo: Leticia, por favor.
Leticia: (Hablando a la pantalla) Ay, Ricardo, mi amor... ¡Saluda! A la gente le encanta verte.
Ricardo: No. Ya te dije que no me gusta esta... exhibición. Leticia, te recuerdo que hoy es la junta para elegir al nuevo administrador del condominio. Es importante.
Leticia: Ay, qué aburrido, mi vida. ¡No me da likes lo que dices! Ricardo, ¿puedes acomodar estos cables? Afean el lugar.
(Ricardo suspira. Se agacha a acomodar los cables. Elías, el hijo menor, entra sin quitarse unos audífonos futuristas, y se sienta a la computadora. Ricardo lo mira, desesperado.)
Ricardo: Elías. ¡Quítate los audífonos! No es normal que no me escuches.
Elías: (Sin voltear a verlo, la voz sale de un sintetizador en su computadora) Mi campo auditivo se encuentra optimizado para frecuencias bajas. Su voz no es una prioridad, padre.
Ricardo: (A Leticia) ¡Mira a tu hijo! Un día de estos va a salir a la calle y lo van a atropellar.
Leticia: Ricardo, no exageres. ¡Mira qué lindo! Le han puesto un thumbs up en su story.
(Ricardo se queda parado en medio de la sala, resignado. Suena el timbre. Nadie se da cuenta. Elías ni se inmuta. Leticia sigue grabando. Leo está en una nube de narcisismo.)
Ricardo: Ya voy yo. (A la puerta) ¿Quién es?
Karen: (Desde afuera) ¡Soy la nueva vecina! ¡De la 301, su puerta de al lado! Y... creo que mi gato se ha escapado. ¿Lo han visto? Es un siamés con un ojo azul y uno verde... se llama Schrödinger.
(Ricardo abre la puerta. Entra Karen. Viste ropa cómoda, pero con un aire de diseñadora moderna. Lleva una mochila con un logo que dice: “Reboot Reality”. Se ve ligeramente agitada.)
Karen: ¡Hola! ¡Soy Karen, su nueva vecina! Disculpen la intromisión, pero estoy buscando a mi gato. Es muy escurridizo.
(El silencio es total. Nadie le hace caso. Leticia sigue grabando.)
Leticia: (Al teléfono) ¡Ay, mis followers, creo que tenemos una invasora! Dice que busca un... ¿cómo dijo? ¿Un monstruo de ojos raros? ¡Qué miedo!
Leo: (Con los audífonos puestos) ¿Alguien dijo streaming de terror? ¡Mis seguidores aman eso!
Elías: Analizando patrones de escape felino en edificios de alta densidad... Probabilidad de reaparición en conductos de ventilación: 78.3%.
Ricardo: (Frustrado) ¡Un momento, por favor! Vecina Karen, bienvenida. Disculpe a mi familia, están un poco... ensimismados. No hemos visto ningún gato.
Karen: Oh, qué lástima. Es que justo antes de tocar su timbre, juraría que vi un destello de ojos diferentes por aquí... Tal vez se metió en algún rincón.
(Karen comienza a mirar alrededor, moviendo cojines y asomándose detrás de los muebles.)
Leticia: (Gritando) ¡Ay! ¡Sentí algo peludo en mi pie! ¡Ricardo, sácame este bicho de encima!
(Leticia se levanta de un salto, mirando el suelo con horror. No hay nada.)
Leo: ¡Mamá, tranquila! Seguro es tu imaginación. Aunque... un gato mutante radioactivo sería un buen plot twist para mi próximo gameplay.
Elías: Registro de fluctuaciones térmicas anómalas cerca del sofá... Podría indicar la presencia de un cuerpo homeotermo de tamaño reducido.
Ricardo: (A Karen, con una sonrisa forzada) No se preocupe, vecina. Si vemos a su... Schrödinger, se lo haremos saber. Ahora, si nos disculpa...
Karen: Claro, claro. Gracias. Igual, si escuchan un maullido extraño... ¡es él! (Karen les da una tarjeta con su número.) ¡Cualquier cosa!
(Karen se retira. Al cerrar la puerta, Ricardo suspira aliviado.)
Leticia: ¡Sigo sintiendo cosquillas! ¡Seguro dejó pulgas! ¡Voy a tener que desinfectar todo!
Leo: ¡Pulgas gamers! ¡Podrían ser la nueva epidemia online!
Elías: Iniciando protocolo de escaneo de parásitos en el espectro electromagnético... Resultados negativos. La sensación podría ser de origen psicosomático.
Ricardo: (Gritando) ¡Ya basta! ¡No hay ningún gato! ¡Es una simple vecina nueva!
(Justo en ese momento, se escucha un leve maullido, proveniente de un lugar indeterminado.)
Leticia, Leo y Elías: ¡El gato!
Ricardo: (Con la cara desencajada) Esto... esto no puede estar pasando.
<center>Acto II</center>
Escena 2: El Misterio Felino y el Apagón Inesperado
(La escena continúa al día siguiente. La búsqueda del gato Schrödinger se ha convertido en una obsesión para los Santoyo. Leticia rocía cada rincón con desinfectante, asegurando haber visto "sombras felinas" en el reflejo de las pantallas apagadas. Leo está grabando videos teorizando sobre la naturaleza cuántica del gato perdido, sugiriendo que podría estar en múltiples dimensiones a la vez. Elías ha dedicado todos sus recursos informáticos a rastrear cualquier señal de la presencia del felino en la red del condominio.)
Leticia: ¡Lo vi! ¡Juro que vi su cola entre los cojines del sofá! Era... como una sombra alargada con un toque de color siamés.
Leo: ¡Eso confirma mi teoría! ¡El gato de Karen es un ente interdimensional que se manifiesta brevemente en nuestro plano de existencia! ¡Voy a titular mi próximo streaming: "Schrödinger: El Gato Fantasma de Central Park"!
Elías: Análisis de patrones de maullidos grabados por vecinos en los últimos meses... Correlación del 92% con vocalizaciones felinas de raza siamesa. La presencia del sujeto "Schrödinger" en el edificio podría ser un evento recurrente.
Ricardo: (Entra con el periódico, visiblemente alterado) ¡Esto es ridículo! ¡Ya hay un grupo de Facebook dedicado al "Gato Misterioso de Central Park"! ¡La gente está organizando batidas de búsqueda! ¡Van a invadir nuestro departamento!
(En ese momento, las luces parpadean y todo el departamento se queda a oscuras. Los dispositivos electrónicos se apagan.)
Leticia: ¡El apagón! ¡Seguro fue el gato! ¡Saboteó el sistema eléctrico con sus poderes psíquicos!
Leo: ¡Un apagón gamer! ¡Esto es una señal! ¡El universo conspira para que vuelva a mi streaming! Aunque... sin internet...
Elías: (En la oscuridad, su voz ligeramente asustada) Iniciando protocolo de emergencia... Activando linterna táctica... Detección de picos de energía justo antes del fallo... Posible sobrecarga causada por... ¿un gato?
Ricardo: (A tientas) ¡Ya basta! ¡No fue ningún gato! Seguro fue un problema con el transformador del edificio. ¡Esto es un caos! ¡Y hoy tenía otra junta crucial! ¡Mis diapositivas estaban en la nube!
(Se escucha la voz de Karen desde el pasillo.)
Karen: ¡Vecinos! ¿Están bien? ¡Hubo un apagón general en el edificio! ¿Alguien ha visto a Schrödinger en la oscuridad? ¡Es aún más difícil encontrarlo así!
Leticia, Leo y Elías: ¡Karen! ¡Su gato causó esto!
Ricardo: (A Karen, intentando mantener la compostura) Vecina, buenas noches. Sí, estamos bien... ¿Cree que su gato...?
Karen: (Con un tono de misterio) Schrödinger es un gato muy especial... Digamos que tiene una forma muy particular de interactuar con la energía.
(La familia Santoyo se mira en la oscuridad, con la creciente sensación de que la llegada de Karen y la desaparición (¿o no?) de su gato han alterado sus vidas de una manera insospechada.)
<center>Acto III</center>
Escena 3: La Realidad Desconectada y la Partida Misteriosa
(Ha pasado una semana desde el apagón. La energía se restableció, pero la familia Santoyo se encuentra extrañamente desconectada de sus dispositivos. El módem parece averiado sin explicación. Leticia ha descubierto el placer de observar las plantas de su balcón, aunque sigue convencida de que las hojas se mueven solas por la presencia espectral del gato. Leo intenta dibujar, frustrado por la falta de likes inmediatos. Elías está construyendo un dispositivo rudimentario con antenas y latas, "para detectar las ondas etéreas de Schrödinger".)
Leticia: ¡Miren! ¡La maceta se movió otra vez! ¡Es él! ¡Está jugando con nosotros desde el más allá digital!
Leo: ¡Sin internet, mi existencia online es nula! ¡Es como si hubiera desaparecido! Aunque... he tenido una idea para un live action sobre un gamer atrapado en el mundo real por un gato fantasma.
Elías: Análisis... Captando débiles señales... Podrían ser fluctuaciones de energía psi-felina... O la lavadora del vecino.
Ricardo: (Más relajado de lo habitual) Curiosamente, sin internet he podido leer ese informe que tenía pendiente hace meses. Y he hablado con mis hijos... ¡cara a cara! Es... diferente.
(Karen entra al departamento sin tocar, con una pequeña caja en sus manos.)
Karen: ¡Hola, vecinos! Traigo buenas noticias... y tal vez una explicación.
Leticia, Leo y Elías: ¡El gato! ¿Lo encontró?
Karen: (Sonriendo enigmáticamente) Digamos que Schrödinger tiene una forma muy particular de manifestarse. Y a veces, cuando su trabajo aquí termina... simplemente se va.
Ricardo: ¿Su trabajo? ¿Qué quiere decir?
Karen: Vine a Central Park con un propósito: recordarles lo que es importante más allá de las pantallas. A veces, un pequeño... "reboot" es necesario. Y Schrödinger es muy bueno en eso.
(Karen abre la caja. Dentro, no hay un gato, sino un pequeño dispositivo electrónico con una luz parpadeante.)
Karen: Este es un generador de interferencia cuántica de baja potencia. Lo activé temporalmente. El apagón, la avería del módem... fueron parte de la experiencia.
Leticia: ¿Experiencia? ¿Todo esto fue planeado? ¿Y el gato...?
Karen: Schrödinger es una metáfora. Una forma de hacerles prestar atención a lo invisible, a lo que realmente importa.
Leo: ¡¿Entonces no hay un gato fantasma interdimensional?! ¡Mi live action!
Elías: Análisis... Engaño sofisticado con elementos de disrupción tecnológica y sugestión psicológica... Fascinante.
Ricardo: (Con una leve sonrisa) Karen... usted es... peculiar.
Karen: (Guiñando un ojo) Digamos que soy una diseñadora de experiencias que se toma su trabajo muy en serio. Ahora, debo irme. Tengo otros "reboots" que realizar en otros universos... digo, condominios.
(Karen se despide y se va, dejando a la familia Santoyo en silencio, mirando el dispositivo parpadeante. De repente, el módem se enciende, la luz azul parpadea, indicando conexión a internet.)
Leticia: ¡El internet volvió!
Leo: ¡Mis seguidores!
Elías: Accediendo a mis archivos...
Ricardo: (Suspira) Las cosas vuelven a la normalidad... ¿O no?
(Los tres se acercan a sus pantallas, pero por un instante, dudan. En el silencio, se escucha un suave maullido, muy débil, proveniente de algún lugar de la casa. Los cuatro se miran.)
Fin