La balsa
Obra de Benjamín Gavarre
Personajes:
Doctor Lavín
Doctor Gálvez
Lilith
Ramón
Gustavo
Inma
Renata
Residente (Julio)
La acción transcurre en un hospital de especialidades psiquiátricas.
CUADRO PRIMERO
Escena 1
Doctor Lavín y Doctor Gálvez.
Doctor Lavín: (Sin dejar de jugar con su teléfono) ¡Pretenden que vaya a cuidarlos a sus casas!
Doctor Gálvez: (Concentrado en un libro) No debí revelar la muerte de Laura.
Doctor Lavín: (Ácido) ¿En serio?
Doctor Gálvez: Creen que las medicinas solo curan infecciones.
Doctor Lavín: Tener que soportarlos... A veces quisiera quedarme solo con la consulta privada. Y encima me llaman asesino.
Escena 3
Lilith y el doctor Lavín.
Lilith: (Como un eco) ¿Alguien se preocupó cuando dijo que esta vez se quería morir?
Doctor Lavín: Si pudiera regresar en el tiempo...
Lilith: La vida de sus pacientes está en sus manos.
Doctor Lavín: Creí que ese era el papel de Dios.
Lilith: (Furiosa) ¿Bromea?
Doctor Lavín: Nadie podía salvarla.
Lilith: Usted no entiende nada.
Doctor Lavín: ¿Y usted qué habría hecho?
Lilith: No lo sé. Tengo mis propios problemas. Mis hijas están hartas de mí. Yo antes reía. Antes.
Oscuro.
Escena 4
Gustavo, Renata, Ramón e Inma en la sala de espera.
Inma: Los doctores se tardan.
Gustavo: Hoy solo viene Lavín.
Ramón: (Cortante) El doctor Lavín.
Inma: (A Renata) ¿Cómo sigues?
Renata solo gesticula una sonrisa nerviosa.
Ramón: No nos corresponde comentar nada. Hay que esperar a los especialistas.
Gustavo: (Retador) Los esperaremos.
Pausa. Inma llora.
Inma: Yo sabía que tenía esas pastillas. Pudo evitarse.
Ramón: Agradezcamos que no pagamos la consulta.
Gustavo: Lo pagamos con impuestos.
Ramón: Si tuviéramos que pagar lo que cuesta, estaríamos peor.
Gustavo: Yo no estoy demente. Vengo por las medicinas, nada más. (Pausa) Laurita hizo su último berrinche.
Ramón: Yo soy más que un diagnóstico. Y no tienes por qué insultarla.
Gustavo: Fue una figura retórica. Nunca quiso madurar.
Ramón: Sé lo que es una figura retórica.
Gustavo: Cierto, eres maestro.
Ramón: Mira quién habla de no usar etiquetas.
Gustavo: Touché.
Escena 5
Llega el Doctor Lavín. Inicia la sesión de terapia.
Ramón: Me siento cada vez más torpe. Manejando, perdí la noción de dónde estaba. Digo palabras que no son. En el pizarrón me faltan letras. No sé si la gente me entiende.
Gustavo: ¿Vocales o consonantes?
Ramón: ¿Qué importa eso?
Gustavo: A mí me pasaba. Se me dormían las piernas, se me nublaba la vista. Cuando me enojaba, perdía hasta la voz.
Ramón: Cuando grito, todo se pone rojo. Siento la cabeza caliente, no me controlo.
Doctor Lavín: (Brevemente) Se llama somatización. Ramón, ¿toma su medicamento?
Ramón: He tratado de bajar la dosis. No quiero depender de él.
Inma: Es como si uno se atacara a sí mismo, ¿no, doctor?
Doctor Lavín: Ahora todos son especialistas.
Gustavo: Es que usted no explica nada.
Doctor Lavín: (Ignorándolo) Renata, ¿cómo siguen sus piernas?
Ramón: Doctor, no terminamos con mi asunto.
Doctor Lavín: Hay más asuntos, Ramón. La sesión terminó. Nos vemos el lunes.
El doctor Lavín se va. Ramón lo sigue. Inma y Gustavo quedan solos.
Gustavo: El doctor es un imbécil, ¿no crees?
Inma: Sí. Pero las medicinas ayudan.
Salen. Oscuro.
Escena 6
El doctor Gálvez, solo, da una cátedra imaginaria sobre Laura.
Doctor Gálvez: Laura tuvo fuerza para sanar su cuerpo, pero no para soportar la indiferencia. Su enfermedad fue un arma para controlar a su familia. Un arma que no funcionó. Su marido la dejó, sus hijas la ignoraron. Su muerte fue su último intento por provocar algo en ellos... y no provocó nada.
Aparece el Residente.
Residente: (A un auditorio imaginario) ¿Qué hacer con un paciente decidido a morir? ¿Internarlo? ¿Encadenarlo? Los pacientes ya no viven en los hospitales. Al final, la pregunta es: ¿a quién le importa?
Cambio de escena. Lilith y Lavín, frente a frente.
Lilith: Me alegro de que Laura muriera. Ahora descansa. Yo también quisiera acabar con todo.
Doctor Lavín: ¿Y por qué no lo hace?
Lilith: (Sorprendida) ¿Quiere que me suicide?
Doctor Lavín: Usted lo desea, ¿o no?
Lilith: Para usted es fácil. Sabe que soy incapaz y por eso me provoca. Lo odio.
Doctor Lavín: ¿Y qué piensa de eso?
Lilith: ¿De que lo odio? Mi hija dice que usted está loco.
Doctor Lavín: Si no le agrado, busque otro doctor.
Lilith: Nos vemos la próxima semana.
CUADRO SEGUNDO
Escena 1
El doctor Gálvez, solo, analiza el caso de Renata.
Doctor Gálvez: Renata es una tirana sin reino. Su dolor de piernas es el reflejo de su vida. Atrapada con un marido inútil y una suegra a la que odia. Pero el verdadero veneno lo guarda para su hija, a quien no tolera porque la niña adora a su abuela. Renata es una mujer ahogada por la figura materna, incapaz de amar porque nunca fue amada.
Escena 2
Sesión de psicodrama con Renata, Gustavo y Lilith, dirigida por el Dr. Gálvez.
Renata: Mi madre nunca me perdonó que me vieran besando a un vecino. Me llamó "cualquiera". Decía que era infértil, siempre culpándome. Prefiere a mi cuñada, la que sí estudió.
Gustavo: ¿Y por qué no te vas de esa casa y ya?
Doctor Gálvez: (Irónico) Nada más fácil. (A Gustavo) Hagamos una dramatización. Usted será Ricardo, el marido. Lilith, la suegra. Renata, dígale a su marido que si no se van de esa casa, usted se mata.
Renata: (A Gustavo) Mira, Ricardo. Tu madre te tiene agarrado de los huevos... (A Lilith) ¡Pinche vieja cabrona! ¡Te robaste a mi hija y a tu hijo!
Doctor Gálvez: Ahora háblele a su hija. Yo soy ella.
Renata: (Al Doctor) ¡Maldita seas! Me traicionas con ella. No sé darte cariño, pero te cuido, ¡y tú te vas con esa pinche vieja!
Doctor Gálvez: Ahora, a su madre.
Renata: (A Lilith, como si fuera su madre) ¡Ojalá te lleve la chingada, perra desgraciada! ¡Ojalá nunca me hubieras parido!
Pausa.
Doctor Gálvez: Bien. El ejercicio terminó. Lo importante, Renata, es que sepa a quién le tiene tanto odio. Después, viene lo difícil: perdonar.
Renata: ¿Quiere decir que odio a mi madre?
Doctor Gálvez: Usted lo dijo.
Oscuro.
Escena 5
El Residente dirige un ejercicio con Gustavo y Ramón.
Residente: (Voz en off) Ramón es rígido. No se permite reír ni llorar. Gustavo tiene problemas con la autoridad. Se detestan.
Gustavo: No me desagradas, solo me incomodas.
Ramón: Con tus aires de grandeza, deberías tener un médico particular.
Gustavo: No tengo dinero. Y tú deberías tomar los medicamentos. No puedes reír, no puedes llorar. Solo sabes enojarte.
Ramón: (Tras una pausa, intenta bromear) Tal vez estamos curados.
Gustavo: El error es pensar que estamos enfermos. ¿Quién es sano?
Ramón: (Tomando conciencia) Tienes razón. No me gustan las etiquetas. Soy más que una clasificación.
Gustavo: Ya hasta me caes bien. (Gritando a la cabina) A ver, doctor, ¿quién es usted cuando deja de ser doctor?
Ramón y Gustavo se miran y sonríen. Oscuro.
Escena 6
La luz se centra en Inma y Lavín. Luego, una escena coral con máscaras.
Inma: Mis padres no me acariciaban. No puedo ser cariñosa con mi marido ni con mi hija. Me desespera que quiera abrazos, no me sale.
Entran los demás con máscaras.
Ramón: No quiero ser el ogro de mi casa. Quisiera abrazar a mi hijo.
Inma: Nadie me dio un abrazo. Por eso no sé controlar mi llanto.
Lilith: Olvidé cómo reír. Odio las bromas.
Ramón: ¡Ustedes no son dioses y nosotros no somos diagnósticos!
Gustavo: Nadie es su personaje todo el tiempo. El Papa también va al baño.
Ramón: Y todos morimos solos. Es el destino.
Lilith: Quiero música. Quiero sentirme bien.
Gustavo: ¡Eso! ¡Bailemos!
Suena la música. Todos bailan, incluidos los doctores sin sus batas. Una explosión repentina. Silencio. Oscuro.
Escena 7
El doctor Lavín, meses después, da un discurso final.
Doctor Lavín: Lilith y Renata murieron por sobredosis. Un accidente, probablemente. Los laboratorios no aceptan responsabilidad. Ramón y Gustavo están de alta; aprendieron a manejar su condición. Yo, por mi parte, dejo el hospital por unos años. Julio, el antiguo residente, se queda a cargo. El doctor Gálvez seguirá apoyando, como siempre. Mi última reflexión es esta: no somos lo que imaginamos ser. Tampoco somos lo que los demás piensan que somos. Gracias. Eso es todo.
Oscuro final.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario